El papa Juan Pablo II  fue uno de los papas más reconocidos de la iglesia católica desde que fue elegido en 1978. ¿Quieres conocer las mejores frases de Juan Pablo II? ¡Las encontrarás en este nuevo artículo de Frases de la Vida!

El verdadero nombre del papa era Karol Józef Wojtyła, pero desde su elección fue conocido como Juan Pablo II. Nació el 18 de mayo de 1920 en una pequeña ciudad llamada Wadowice en Polonia. Realizó sus estudios de enseñanza media y luego se matriculó a la Universidad Jagellónica de Cracovia, la cual debió cerrar sus puertas como consecuencia de la ocupación nazi, tiempo en el cual Karol se vio forzado a trabajar en una cantera para evitar que lo deportaran a Alemania.

En 1942 Karol siente la vocación del sacerdocio, e ingresa al seminario clandestino de Cracovia. Tras la segunda guerra mundial continúa con sus estudios hasta obtener el su ordenación sacerdotal. Se doctoró en teología, fue profesor, vicario y capellán. Más tarde es nombrado arzobispo y en 1978 los cardenales lo eligen papa. Su pontificado fue de casi 27 años, uno de los más largos de la historia de la iglesia.

Fue sumamente querido por su espíritu tranquilo y por la facilidad con la que se comunicaba, además de su entrega a las obras de caridad y su amor hacia los jóvenes. Anímate y descubre estas interesantes frases de Juan Pablo II que traemos para ti.

Las mejores frases de Juan Pablo II

  1. La peor prisión es un corazón cerrado.

2. Amar es lo contrario de utilizar.

3. La espiral de la violencia sólo la frena el milagro del perdón.

4. Amar es esencialmente entregarse a los demás.

5. ¡La Iglesia de hoy no necesita «cristianos a tiempo parcial», sino cristianos de una pieza!

6. La Iglesia es la caricia del amor de Dios al mundo.

7. Vosotros sois la sal de la tierra.Vosotros sois la luz del mundo.

8. La juventud no está muerta cuando está cercana al maestro.

9. El desarrollo es el nuevo nombre de la paz.

10. Las deportaciones forzadas, la eliminación sistemática de pueblos y el desprecio de los derechos fundamentales de la persona son las tragedias que, desgraciadamente, aún hoy humillan a la humanidad.

11. El sentido más verdadero y profundo de la vida es un don que se realiza al darse.

12. Me afecta cualquier amenaza contra el hombre, contra la familia y la nación. 

13. Occidente parece inclinarse a unas formas de aislamiento creciente y egoísta.

14. El amor se siente, no se ve; el amor silencioso es el mas fuerte de todos.

15. Los medios de comunicación han acostumbrado a ciertos sectores sociales a escuchar lo que halaga los oídos.

16. La humanidad tiene la necesidad imperiosa del testimonio de jóvenes libres y valientes, que se atrevan a caminar contra corriente y a proclamar con fuerza y entusiasmo la propia fe en Dios.

17. Cuando al hombre se le pone como medida de todas las cosas, se le convierte en esclavo de su propia finitud.

18. El respeto a la vida es fundamento de cualquier otro derecho, incluidos los de la libertad.

19. Los pobres no pueden esperar.

20. La vida humana debe ser respetada y protegida de manera absoluta desde el momento de la concepción.

21. Hoy se exalta con frecuencia el placer, el egoísmo, o incluso la inmoralidad en nombre de falsos ideales de libertad y felicidad.

22. Dios no es un ser indiferente o lejano, por lo que no estamos abandonados a nosotros mismos.

23. La salvación no significa que se conceda solamente a los que, de modo explícito, creen en Cristo y entraron en la Iglesia. La salvación en verdad debe de estar a disposición de todos.

24. El hombre no puede vivir sin amor. Su vida está privada de sentido si no se le revela el amor, si no se encuentra con el amor, si no lo experimenta y lo hace propio.

25. Dios ha puesto en el corazón del hombre el deseo de conocer la verdad y, en definitiva, de conocerlo a Él para que, conociéndolo y amándolo, pueda alcanzar también la plena verdad sobre sí mismo.

26. Sin Dios la sociedad acaba deshumanizada.

27. Desde el primer momento de su existencia, el ser humano debe ver reconocidos sus derechos de persona, entre los cuales está el derecho inviolable de todo ser inocente a la vida.

28. Por eso América: si quieres la paz, trabaja por la justicia. Si quieres la justicia defiende la vida. Si quieres la vida, abraza la verdad, la verdad revelada por Dios.

29. ¡No tengáis miedo! ¡Abrid, abrid de par en par las puertas a Cristo!

30. Que nadie se haga ilusiones de que la simple ausencia de guerra, aun siendo tan deseada, sea sinónimo de una paz verdadera.

31. No hay paz sin justicia, no hay justicia sin perdón.

32. La pureza de corazón, como toda virtud, exige un entrenamiento diario de la voluntad y una disciplina constante interior. Exige, ante todo, el asiduo recurso a Dios en la oración.

33. No habrá paz en la tierra mientras perduren las opresiones de los pueblos, las injusticias y los desequilibrios económicos que todavía existen.

34. El recurso a la fuerza constituye siempre una derrota de la humanidad.

35. En realidad, todas las cosas, todos los acontecimientos, para quien sabe leerlos con profundidad, encierran un mensaje que, en definitiva, remite a Dios.

36. Dios se deja conquistar por el humilde y rechaza la arrogancia del orgulloso.

37. Con dolor la pobreza de muchos, en contraste con la opulencia de algunos.

38. Hasta que quienes ocupan puestos de responsabilidad no acepten cuestionarse con valentía su modo de administrar el poder y de procurar el bienestar de sus pueblos, será difícil imaginar que se pueda progresar verdaderamente hacia la paz.

39. Ningún pecado del hombre puede cancelar la misericordia de Dios.

40. Soy un joven de 83 años.

41. No debe buscarse ninguna recompensa mayor que el amor mismo.

42. La Iglesia es el corazón de la humanidad.

43. Dios ha puesto en el corazón del hombre el deseo de conocer la verdad y, en definitiva, de conocerlo a Él para que, conociéndolo y amándolo, pueda alcanzar también la plena verdad sobre sí mismo.

44. No hay verdadera paz si no viene acompañada de equidad, verdad, justicia y solidaridad.

45. La familia está llamada a ser templo, casa de oración: una oración sencilla. Una oración que se hace vida, para que toda la vida se convierta en oración.

46. Lo mismo en la época de las lanzas y las espadas que en la era de los cohetes nucleares: la primera víctima es el corazón del hombre.

47. Las cuestiones controvertidas nunca deben resolverse con el recurso de las armas.

48. La democracia necesita de la virtud si no quiere ir contra todo lo que pretende defender y estimular.

49. En nuestros días se advierte la creciente conciencia de que la paz mundial está amenazada, no sólo por la carrera de armamentos, sino también por la falta de respeto a la naturaleza, y al progresivo deterioro de la calidad de vida.

50. Debemos perdonar siempre, recordando que nosotros mismos hemos necesitado el perdón. Tenemos necesidad de ser perdonados mucho más a menudo que de perdonar.

51. La auténtica religión no apoya el terrorismo y la violencia, sino que busca promover de toda forma posible la unidad y la paz de toda la humanidad. 

52. ¡No matéis! ¡No preparéis a los hombres a la destrucción y exterminio! ¡Pensad en vuestros hermanos que sufren hambre y miseria! ¡Respetad la libertad y dignidad de cada uno!

53. Pido perdón por las injusticias infligidas a los no católicos en el curso de la atormentada historia de estas gentes; y al mismo tiempo aseguro el perdón de la Iglesia Católica por el daño que han sufrido sus hijos.

54. El hombre es esencialmente un ser social; con mayor razón, se puede decir que es un ser familiar.

55. Hoy más que nunca la Iglesia necesita sacerdotes santos cuyo ejemplo diario de conversión, inspire en los demás el deseo de buscar la santidad. 

56. La fe, además de conocerla, hay que vivirla.

57. La verdadera reconciliación entre hombres enfrentados y enemistados sólo es posible si se dejan reconciliar al mismo tiempo con Dios.

58. El futuro depende, de la familia, que lleva consigo el porvenir mismo de la sociedad; su papel especialísimo es el de contribuir eficazmente a un futuro de paz.

59. Les pido a todos, a todo el pueblo, que por lo menos dejen una ventana abierta para que Cristo entre en sus vidas.

60. Las políticas familiares basadas en la esterilización masiva, en la promoción del aborto o del divorcio producen resultados dramáticos: la desintegración de la célula fundamental de la sociedad.

61. Cuando el cristianismo se convierte en instrumento del nacionalismo, queda herido en su corazón y se convierte en estéril.

62. La paz no se escribe con letras de sangre, sino con la inteligencia y el corazón.

63. La Fe no teme a la razón. Estas son como dos alas con las cuales el espíritu humano se eleva hacia la contemplación de la verdad.

64. Basta con mirar la realidad de la multitud ingente de hombres y mujeres, niños, adultos y ancianos; en una palabra, personas irrepetibles que sufren el peso intolerable de la miseria.

65. ¡Nunca más la guerra! Que destruye la vida de los inocentes, que enseña a matar y trastorna igualmente la vida de los que matan, que deja tras de sí un rastro de rencores y odio, y hace más difícil la solución de los problemas.

66. Los creyentes de todas las religiones, junto con los hombres de buena voluntad, abandonando cualquier forma de intolerancia y discriminación, están llamados a construir la paz.

67. La cruz de Cristo se ha convertido en una fuente de la que brotan ríos de agua viva.

68. María es el modelo de un amor sin fronteras.

69. El hombre tiene una necesidad profunda, un hambre que es mayor que aquella que el pan puede saciar: es el hambre que posee el corazón humano de la inmensidad de Dios.

70. Si nos alejamos de Dios, ¿quién nos garantiza que un día un poder humano no reivindique de nuevo el derecho a decidir qué vida humana vale y cuál no vale?

71. El verdadero conocimiento y la auténtica libertad se hallan en Jesús. Dejad que Jesús forme parte siempre de vuestra hambre de verdad y justicia.

72. La Iglesia se dirige al hombre en pleno respeto a su libertad; propone, no impone nada; respeta las personas y las culturas, y se detiene ante el sagrario de la conciencia.

73. La vocación del cristiano es la santidad, en todo momento de la vida. En la primavera de la juventud, en la plenitud del verano de la edad madura, y después también en el otoño y en el invierno de la vejez, y por último, en la hora de la muerte.

74. El matrimonio y la familia cristiana edifican la Iglesia. Los hijos son fruto precioso del matrimonio.

75. La familia es para los creyentes una experiencia de camino, una aventura rica en sorpresas.

76. La auténtica intuición artística va más allá de lo que perciben los sentidos y, penetrando la realidad, intenta interpretar su misterio escondido.

77. El sufrimiento humano ha alcanzado su culmen en la pasión de Cristo.

78. La familia es base de la sociedad y el lugar donde las personas aprenden por vez primera los valores que les guían durante toda su vida.

79. El bien de la persona consiste en estar en la verdad y en realizar la verdad.

80. La paz exige cuatro condiciones esenciales: Verdad, justicia, amor y libertad.

81. Los artistas logran expresar en lo que pintan, esculpen o crean, un tenue reflejo del esplendor que durante unos instantes ha brillado ante los ojos de su espíritu.

82. De todas las cosas sin importancia, el fútbol es, de largo, la más importante.

83. La guerra es siempre una derrota de la humanidad.

84. Las obras de arte hablan de sus autores, introducen en el conocimiento de su intimidad y revelan la original contribución que ofrecen a la historia de la cultura.

85. El más indestructible de los milagros es la fe humana en ellos.

86. A través de la oración, Dios se revela en primer lugar como Misericordia, es decir, como Amor que va al encuentro del hombre que sufre. 

87. Deja que Cristo te encuentre.

88. El terrorismo nace del odio, se basa en el desprecio de la vida del hombre y es un auténtico crimen contra la humanidad.

89. El artista vive una relación peculiar con la belleza. En un sentido muy real puede decirse que la belleza es la vocación a la que el Creador le llama. 

90. La solidaridad no es un sentimiento superficial, es la determinación firme y perseverante de empeñarse por el bien común, es decir, el bien de todos.

91. El amor es más fuerte.

92. La verdad y la solidaridad son dos elementos claves que permiten a los profesionales de los medios de comunicación convertirse en promotores de la paz.

93. Internet es ciertamente un nuevo foro.

94. La Virgen es nuestra auténtica educadora en el camino de la fe.

95. Amemos al hombre, a cada hombre, mujer y a cada niño, porque son parte de la humanidad que amamos.

96. De la celebración dominical surgen los motivos de alegría y esperanza, que dan nuevo sabor a la vida de cada día y constituyen un antídoto vital contra el aburrimiento, la falta de sentido y la desesperación.

97. Internet puede ofrecer magníficas oportunidades para la evangelización si se usa con competencia y con una clara conciencia de sus fuerzas y sus debilidades.

98. Algunos teólogos contemporáneos de Galileo no supieron interpretar el significado profundo, no literal, de las Escrituras, cuando éstas describen la estructura física del universo creado.

99. Los medios de Comunicación social: un ámbito moderno para la promoción de la mujer en la sociedad.

100. Dejadme ir a la casa del padre. (últimas palabras de Juan Pablo II)

¡Hemos llegado al final de nuestro artículo de frases de Juan Pablo II! Muy ciertas ¿no crees? Fue beatificado el 1 de mayo de 2011 y canonizado junto a Juan XXIII, el 27 de abril del 2014. Siempre será recordado por su iglesia como uno de los papas más especiales y queridos de la historia.

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Imágen: lezumbalaberenjena