«Porque un poco de verano, hace que todo el año valga la pena», esta mítica frase de John Mayer nos hace ser optimistas, a pesar de los acontecimientos a nivel mundial que están ocurriendo.
El verano es sinónimo de días de playa, noches improvisadas, locura, amor, descanso después de un duro año, de chiringuito y sobre todo de oler a sol, a margaritas y a una pizca de agua del río. Eso es el verano.
Este año sin lugar a dudas será un verano mucho más casero dadas las circunstancias, pero a la vez viviremos el verano suavizaba las líneas que el cruel invierno mostraba por la pandemia mundial de la Covid19 vivida.
Al ir a pasar más horas en nuestra casa, bien sea por el miedo de la población a los rebrotes de Covid-19, los aforos limitados de hoteles, piscinas y restaurantes debemos adelantarnos a las vacaciones estivales y preparar nuestra casa equipándola al completo.
Disfrute dentro de casa
Tumbarse a veces en la hierba bajo los árboles en un día de verano, escuchando el murmullo del agua o viendo las nubes flotar por el cielo, no es de ningún modo una pérdida de tiempo, muy al contrario, será una de las mejores maneras para pasar los días relajándonos bajo una pérgola.
Donde entra el aire y el sol, no entra el doctor, esa sería la máxima que deberíamos tener para disfrutar de la parte exterior de nuestras casas, sabiendo que el sol es salud y ayuda a que generemos vitamina D y que tengamos además una mejor salud mental.
Pero todo con precaución, puesto que si tomo suficiente sol me puedo convertir en una peca gigante, por lo que resguardarnos a ratos o en las horas más fuertes del sol es lo más conveniente para evitar problemas dermatológicos, puesto como dice el dicho popular: Ni en invierno, ni en verano, te pongas al sol de plano, si no queremos males mayores.
Sol a mediodía, tarde dura y noche fría
Algo bueno que tienen los días de verano son sus tardes y sus noches que podemos pasar relajados en los espacios exteriores de nuestro hogar, perfectamente equipados.
Esas noches de verano con amigos en las que no debemos olvidar que la noche de verano es como una perfección del pensamiento.
Por lo que aprovechemos este verano desde nuestra casa siendo conscientes que los veranos vuelan siempre… los inviernos caminan