¡Bienvenido a Frases de la Vida! En esta ocasión hemos decidido hurgar dentro del fascinante mundo del psicoanálisis. Para ello, tenemos para ti una selección de frases de Jacques Lacan, uno de sus principales exponentes. Lo cierto es que se trata de una disciplina controversial: amada y rechazada en partes iguales. El objetivo principal de este artículo es el de divulgar una de las voces más destacadas del ámbito psicoanalítico, para que puedas comprender algunos de sus conceptos fundamentales a través del uso de diversas citas como motor para la reflexión.
Jacques Lacan nació en París en el año 1901. Se trata de un psiquiatra, filósofo y psicoanalista que dedicó gran parte de su vida al estudio de la teoría freudiana, articulándola según sus parámetros e impulsando, a través de las bases del estructuralismo francés, la reformulación de un saber más concreto y detallado. Ello le costó tanto críticas como adhesiones, dado que sus premisas y estudios respecto de los ejes centrales del psicoanálisis se diferenciaban inmensamente de la perspectiva adoptada por entidades tales como la Asociación Psicoanalítica Internacional.
Más tarde, la escuela lacaniana obtuvo una mayor aceptación, alcanzando el reconocimiento incluso más allá de las fronteras francesas. Los pensamientos de Lacan fueron plasmados en diversas obras, entre las cuales encontramos dos grandes categorías: los Escritos y sus Seminarios. La lectura de los primeros puede parecer ardua, y es capaz de condensar una infinidad de saberes y de referencias dentro de un único párrafo; a pesar de habernos dejado únicamente dos Escritos, los mismos se constituyen como verdaderos cofres de conocimiento. Los Seminarios, por su parte, están regidos por la intensión de ordenar, de acomodar la vasta cantidad de conceptos psicoanalíticos en diferentes tomos temáticos, haciendo uso de la transcripción de las clases orales dictadas por el propio Jacques Lacan. A modo de ejemplo, podríamos mencionar al Seminario III: Las Psicosis (1955), y al Seminario V: Las formaciones del inconsciente (1957).
La consigna del padre de la escuela francesa siempre fue el «retorno a Freud». Bajo la misma, intentó rescatar los aspectos fundamentales de la obra freudiana que, a criterio de Lacan, habían sido calurosamente descuidados e incomprendidos por otros referentes psicoanalíticos. Para ello se sirvió de la lingüística estructural, apelando a autores tales como Jakobson y Saussure. El lenguaje y lo simbólico se ubicarían en el trono de su obra, que incluye un profundo análisis de la psique humana a partir de fórmulas complejas, que se proponen un horizonte donde los malos entendidos disminuyan y den lugar a la consolidación de una teoría resistente.
Con esta breve introducción, daremos lugar a nuestra selección de frases de Jacques Lacan. ¡Que las disfrutes!
Las mejores frases de Jacques Lacan
1. El analista no es el que sabe, quién sabe es el analizante.
La primera de las frases de Jacques Lacan pone de manifiesto un cambio en la concepción del sujeto que acude a una consulta psicoanalítica. En lugar de llamarlo «paciente», nombramiento que acerca al sujeto a una posición pasiva, Lacan prefirió utilizar el término «analizante», el cual permite una posición más activa por parte de aquel que quiere saber acerca de su dolor y de sus verdades inconscientes, y que trabaja por ello durante su asociación libre (técnica utilizada). La pareja analítica se constituiría en términos de analista y analizante.
2. La estructura del inconsciente es similar a un lenguaje.
Uno de los dichos más frecuentes de Jacques Lacan afirma que el inconsciente está estructurado como un lenguaje. Esto quiere decir que todo aquello que guarda nuestro inconsciente entra en relación con el mundo simbólico y se estructura según sus leyes. En esta misma línea, expresará que el inconsciente es el discurso de un Otro, discurso que hemos interiorizado y que ignoramos a diario a pesar de que sus manifestaciones resulten visibles.
3. El síntoma es una metáfora.
Muchas de las frases de Jacques Lacan exponen conceptos anteriormente acuñados por Freud. Tal es el caso de esta cita, que afirma que el síntoma en cualquiera de sus variantes (físico, obsesivo o fóbico) esta allí en lugar de otra cosa: es una de las manifestaciones del deseo inconsciente. El síntoma se nos presenta como «el deseo disfrazado».
4. La verdad es el error que escapa del engaño y se alcanza a partir de un malentendido.
En infinitas ocasiones, la verdad del sujeto sale a la luz a través de un acto fallido, de un decir que el analizante considera «erróneo», un mero malentendido. Lo cierto es que todo aquello que se escape de los cálculos del Yo (nuestra identidad consciente), tiene algo que decir en relación al discurso inconsciente que nos habita.
5. La primera virtud del conocimiento es la capacidad de enfrentarse a lo que no es evidente.
Para iniciar un análisis debemos ser valientes. Nunca es completamente sencillo lanzarse al conocimiento de uno mismo; si bien siempre resulta útil y beneficioso a largo plazo, puede requerir de una zambullida en los sectores más desconocidos de cada quien. En este sentido, el psicoanálisis persigue la ruta del conocimiento en su sentido más amplio: acceder a lo que no es evidente para incorporarlo en nuestro mundo de saberes y hacer algo con ello.
6. Si Freud centró las cosas en la sexualidad es porque en la sexualidad, el ser parlante balbucea.
La sexualidad obtuvo un papel relevante dentro de la obra de Sigmund Freud. Lacan, por su parte, afirma que «no existe la relación sexual», enunciando con esto que no poseemos, como seres del lenguaje, un modo universal y específico de relacionarnos con la sexualidad, ya que se trata de un amplio espectro de posibilidades. Las respuestas dependerán de cada uno.
7. Somos seres con la capacidad de desear pero siempre incompletos, de ahí surge nuestro caminar.
Muchas de las frases de Jacques Lacan ponen sobre la mesa aspectos vinculados al deseo. Podríamos articular que el deseo parte de una falta. Esta última es indispensable para ponernos en movimiento. Deseamos indefectiblemente lo que no tenemos y podemos decidir caminar hacia ello.
8. Amar es dar lo que no se tiene a quien no lo es.
Le toca su turno a una de las más famosas frases de Jacques Lacan. La misma resuelve que cuando amamos, lo hacemos proyectando en el otro aspectos que tienen que ver con nuestros propios deseos y anhelos: recortamos al partenaire para ver aquello que deseamos de los demás. ¡Ha llegado aquello que nos faltaba! Y que es la falta sino «lo que no se tiene» que, como antes mencionábamos, es motor del deseo.
9. Sóo se siente culpable quien cedió en su deseo.
La culpa aparece dentro de la obra lacaniana como el reverso del deseo. Cada vez que cedemos en nuestro deseo y volteamos en la dirección opuesta nos avasalla la culpa. Este concepto fue largamente estudiado y desarrollado en diversos Seminarios del psicoanalista.
10. De una herida, lo que importa es la cicatriz.
¿Cómo podemos identificar y sanar una herida? Primero en principal, reconociendo su cicatriz. Sólo a partir de ella podremos ir desglosando lo sucedido, articulándolo a través del discurso y subsanando lo que nos mortifica. La cicatriz permite la rememoración y la resignificación: otorgaremos palabras y compresión a la herida que hemos evadido.
Más Frases de Jacques Lacan
11. Usted podrá llegar a saber lo que dice, pero no lo que el otro escuchó.
12. Pienso donde no soy, luego soy donde no pienso.
13. Si usted ha comprendido, seguramente está equivocado.
14. Sólo el amor hace condescender el goce al deseo.
15. La realidad es el soporte para el fantasma del neurótico.
16. El deseo del humano es el deseo del otro.
17. La vida posee un sólo sentido, poder jugársela y jugarse la vida tiene algo de apuesta.
18. El deseo es siempre deseo. La falta genera al deseo. El deseo nunca se satisface del todo. El sujeto está sujetado al deseo.
19. Amar es, sobretodo, querer ser amado.
20. Se puede amar a alguien no sólo por aquello que tiene, sino, literalmente por aquello de lo que carece.
21. ¿Puede existir algo que justifique la fidelidad, que no sea la palabra empeñada? Sin embargo la palabra empeñada muchas veces es empeñada a la ligera. Si no se la empeñase así, es probable que se la empeñara mucho más raramente.
22. ¿Que podría llegar a ser más convincente, no obstante, que le gesto de poner las propias cartas boca arriba sobre la mesa?
23. Para hacer tortillas es preciso romper los huevos.
24. Lo obvio suele pasar desapercibido, precisamente por obvio.
25. Todo deseo nace en la ausencia.
26. Un analista no sabe lo que dice, pero es su deber saber lo que hace.
27. El deseo tiene lugar en esa repercusión que surge de articular el lenguaje al nivel del otro.
28. El sujeto no habla sino que es hablado.
29. Los síntomas, eso que usted cree conocer de las otras personas, le pueden parecer irracionales, pero es debido a que usted los toma de manera aislada, y desea interpretarlos de manera directa.
30. Todo amor es reciproco incluso en el caso de que no sea correspondido.
31. No hay sujeto, si no hay significante que lo funde.
32. Debajo del significante hay nada.
33. …Otros los repetiran ¿Y qué quedará de todos mis decires? (…) acaso sean como la abeja fosilizada en el ámbar, de ella podemos tener la imagen pero nunca sabremos de su vuelo.
34. Es el mundo de las palabras el que crea el mundo de las cosas.
35. Te amo, pero, inexplicablemente y debido a que amo algo más, entonces te mutilo.
36. El analista debe estar atento a la palabra plena.
37. El deseo sujeta al sujeto.
38. No obstante, la verdad analítica no es tan misteriosa, o que sea como un secreto, de modo que nos impida reconocer a las personas que pueden dirigir sus consciencias para ver brotar la verdad de forma espontánea.
39. En otras palabras, el hombre que tiene que enfrentarse con los asuntos de un nacimiento, debe involucrarse en la dinámica del lenguaje que le es dado. Incluso antes del nacimiento ya estaba siendo incluido dentro de él.
40. Sólo el amor hace condescender el goce al deseo.
41. Un analista no sabe lo que dice, pero debe saber lo que hace.
42. Usted podrá saber lo que dijo, pero nunca lo que el otro escuchó.
43. Sólo los idiotas creen en la realidad del mundo, lo real es inmundo y hay que soportarlo.
44. La verdad tiene estructura de ficción.
45. Yo guardo, pero no espero nada.
46. ¿Qué importa cuántos amantes puedas tener si ninguno de ellos puede darte el universo.
47. El psicoanálisis es un instrumento sumamente eficiente, y debido a que cada día gana más prestigio, está en peligro de ser utilizado con un propósito distinto para el que fue creado, y de esta manera podemos degradarlo.
48. Es cierto sólo en la medida en que lo seguimos.
49. Mejor pues que renuncie quien no pueda unir a su horizonte la subjetividad de su época.
50. El analista no hace sino devolverle al analizante su mensaje invertido, como si se tratara de un espejo.
51. Nada satisface el deseo del todo.
52. Todo arte se caracteriza por un cierto modo de organización alrededor de ese vacío.
53. Un sujeto es un significante para otro significante.
54. Tenemos la idea de que es con nuestros cerebros con lo que pensamos, pero yo particularmente pienso con mis pies. Esa es la única forma que me permite entrar en contacto con algo sólido.
55. Nadie habla sino de su propio síntoma.
56. Es deber del analista ocupar el lugar del muerto.
57. Cuando el ser querido va demasiado lejos en la traición a sí mismo y perseverar en el engaño de sí mismo, el amor no lo sigue más.
58. Ser psicoanalista es, sencillamente, abrir los ojos ante la evidencia de que nada es más disparatado que la realidad humana.
59. La narración, en efecto, duplica su drama a partir de los comentarios, sin los cuales, ninguna puesta en escena sería posible.
60. La ansiedad tal y como nosotros la conocemos tiene siempre una conexión con una pérdida. Con una relación que tiene dos caras y puede desvanecerse simplemente al ser reemplazados por otra cosa. Algo a lo que ningún paciente puede enfrentarse sin sentir una sensación de vértigo.
Con esto concluye nuestro recorrido a través de las frases de Jacques Lacan. ¿Qué te han parecido? ¡La sección de comentarios está abierta para ti! Escríbenos tus impresiones y cuéntanos tu opinión respecto de la práctica psicoanalítica. ¡Nos encontramos la próxima con muchas más Frases de la Vida!