Marco Aurelio fue un emperador del Imperio Romano de origen hispano, que gobernaría durante casi dos décadas en la segunda mitad del siglo II, parte de ese tiempo en co-regencia con Lucio Vero. Ha sido considerado como uno de los llamados cinco emperadores buenos, centrados más en su pueblo que en ellos mismos. Las frases de Marco Aurelio que han llegado a nuestros días son, en buena medida, gracias a su principal obra “Meditaciones”, que fue escrita en griego mientras estaba de campaña hacia el año 170. Suele considerarse de una calidad difícilmente igualable para la época.
Gracias en gran parte a sus “meditaciones», las frases de Marco Aurelio se han creado un hueco importante entre las obras más importantes de la filosofía estoica. Esto puso al emperador a la altura de otros grandes autores estoicos de origen también hispano, como Séneca o Lucano. Su obra, como pasaría con “El Príncipe” de Maquiavelo mucho tiempo después, supuso un estudio del gobierno perfecto, al servicio del pueblo y del deber a través de un análisis lógico del entorno. Tan convencido estaba de esta postura que se consideraría a sí mismo, al llegar a la ciudad de Atenas, como protector de la filosofía.
110 Frases de Marco Aurelio, el protector de la filosofía.
1. Los deseos conducen a la permanente preocupación y decepción, ya que todo lo que se desea de este mundo es miserable y corrupto.
2. No llores por mí, pensad en la pestilencia y la muerte de tantos otros.
3. Si descubres en la vida humana algo mejor que la justicia, la verdad, la prudencia y la valentía…dirígele tu atención con toda tu alma y aprovecha ese bien supremo si lo has descubierto.
4. El mundo no es más que transformación, y la vida, opinión solamente.
5. El arte de vivir se asemeja más a la lucha que a la danza.
6. Tú tienes poder sobre tu mente – no sobre los acontecimientos. Date cuenta de esto, y encontrarás la fuerza.
7. En ninguna parte puede hallar el hombre un retiro tan apacible y tranquilo como en la intimidad de su alma.
8. No permitas que tu memoria se enajene de las cosas que tienes, sino de las que te hagan falta.
9. La muerte es algo equiparable al nacimiento, es un misterio de la naturaleza; la composición se produce a partir de los mismos elementos a los que da lugar la desintegración.
10. La vida de un hombre es lo que sus pensamientos hacen de ella.
11. El verdadero modo de vengarse de un enemigo es no parecérsele.
12. Sólo los locos persiguen lo imposible. Imposible es que los malos no cometan maldades.
13. No lo hagas, si no conviene; no lo digas, si no es verdad.
14. Un hombre noble compara y estima a sí mismo por una idea que es superior a él.
15. Todo lo que escuchamos es una opinión, no un hecho. Todo lo que vemos es una perspectiva, no es la verdad.
16. Los hombres han nacido unos para otros, así que o edúcalos o sopórtalos.
17. Lo que no es perjudicial a la ciudad tampoco perjudica al ciudadano.
18. Fui en ocasiones hombre afortunado aunque estuviese sometido a cualquier circunstancia. Esto es ser afortunado, asignarse uno mismo su buena fortuna.
19. ¡Asia, Europa: rincones del mundo; todo el océano: una gota del universo! El Athos: un minúsculo terrón en todo el universo; todo el presente, un instante en la eternidad.
20. Ten presente que los hombres, hagan lo que hagan, siempre serán los mismos.
21. Perseguir imposibles es locura; imposible es que los ruines dejen de hacer ruindades.
22. Acuérdate en adelante, cada vez que algo te contriste, de recurrir a esta máxima: que la adversidad no es una desgracia, antes bien, el sufrirla con grandeza de ánimo es una dicha.
23. No hay que dar tumbos, sino ante cualquier impulso restituir lo justo y ante cualquier representación preservar lo comprensible.
24. La dulzura, cuando es sincera, es una fuerza invencible.
25. ¿Tienes la razón? Sí. ¿Por qué no la usas? Si ella hace lo que le es propio, ¿qué más quieres?
26. Acuérdate también de esto siempre; para vivir felizmente basta con muy poco.
27. El abrazo sexual sólo se puede comparar con la música y con la oración.
28. No desprecies la muerte, sino acéptala de buen agrado, porque forma parte de lo establecido.
29. El tiempo es como un río que arrastra rápidamente todo lo que nace.
30. Nunca discutas con un superior. Corres el riesgo de tener razón.
31. La mejor venganza es ser diferente a quien causó el daño.
32. La única riqueza que conservarás para siempre es la riqueza que has obsequiado.
33. Cuando te levantes por la mañana, piensa en el privilegio de vivir: respirar, pensar, disfrutar, amar.
34. Tienes poder en tu mente, no afuera. Sé consciente de esto y encontrarás las fuerza.
35. Un hombre no debería tener miedo a la muerte, debería tener miedo a no empezar nunca a vivir.
36. Todo lo que escuchamos es una opinión, no un hecho. Todo lo que vemos es una perspectiva, no la verdad.
37. No actúes como si fueras a vivir por diez mil años. La muerte te acecha. Mientras vivas, mientras sea posible, sé bueno.
38. Mira dentro de ti. Dentro está la fuente del bien, y volverá a brotar si sigues cavando.
39. Tranquilo a la vez que resuelto, alegre a la par que consistente, es el hombre que en todo sigue la razón.
40. El alma se tiñe con el color de sus pensamientos.
41. Aquello que no es bueno para la colmena, no puede ser bueno para las abejas.
42. Debemos hacer el bien a los demás tan naturalmente como un caballo corre, una abeja hace miel o una vid da uvas.
43. No gastes más tiempo argumentando acerca de lo que debe ser un buen hombre. Sé uno.
44. Para entender la verdadera calidad de las personas, debes de mirar dentro de sus mentes, examinar sus ocupaciones y aversiones.
45. La pérdida no es otra cosa que un cambio, y el cambio es el deleite de la naturaleza.
46. Cuánto tiempo ahorra el que no se da la vuelta para ver lo que su vecino dice, hace o piensa.
47. La vida no es buena ni mala, sino un lugar para el bien y el mal.
48. En ningún lugar puede un hombre encontrar un retiro más tranquilo e imperturbable que en su propia alma.
49. Rechaza tu sentido de prejuicio y el prejuicio por si solo desaparecerá.
50. El orden universal y el orden personal no son otra cosa que diferentes expresiones y manifestaciones de un principio común fundamental.
51. Estamos demasiado acostumbrados a atribuir a una sola causa lo que es el producto de varias, y la mayoría de nuestras controversias proceden de eso.
52. Un hombre mezquino, por una inferior a sí mismo. El primero produce aspiración; el otro ambición, que es a lo que un hombre vulgar aspira.
53. Nada tiene tanto poder para ampliar la mente que la capacidad de investigar de manera sistemática y real todo lo que es susceptible de observación en la vida.
54. Observa constantemente todas aquellas cosas que toman lugar por el cambio, y acostúmbrate a pensar que nada ama tanto la naturaleza del universo como cambiar las cosas existentes y crear nuevas cosas semejantes.
55. Todo lo que pasa, sucede como debería, y si observas cuidadosamente, encontrarás que esto es así.
56. Comenzar es la mitad del trabajo, comienza nuevamente con la mitad restante, y habrás terminado.
57. El tiempo es una especie de río de acontecimientos y fuerte es su caudal; tan pronto como algo es traído a la vista, es arrastrado y otra cosa toma su lugar, y esto a su vez también será arrastrado.
58. El que vive en armonía consigo mismo vive en armonía con el Universo.
59. Limítate al presente. Hace falta muy poco para tener una vida feliz; está todo dentro de ti, en tu forma de pensar.
60. La felicidad de tu vida depende de la calidad de tus pensamientos; por lo tanto actúa como corresponde, y ten cuidado de no entretenerte en nociones inadecuadas para la virtud y la naturaleza razonable.
61. Nuestra vida es lo que nuestros pensamientos crean.
62. Haz cada cosa en la vida como si fuera lo último que hagas.
63. La pobreza es la madre del crimen.
64. El arte de la vida es más parecido a luchar que a bailar.
65. Deberás de convertirte en un anciano con la suficiente antelación si deseas ser un viejo mucho tiempo.
66. Muchas veces me he preguntado cómo es que cada hombre se ama más a sí mismo que al resto de los hombres, pero a pesar de todo le da menos valor a sus propias opiniones de sí mismo que a las opiniones de otros.
67. Preguntarse qué están haciendo los demás y por qué lo hacen, qué dicen, piensan o planean te distrae y simboliza perder la oportunidad de hacer otras tareas.
68. Todo es en cierto modo bello, es bello por sí mismo y no pide nada más allá de sí mismo. El elogio no es parte de sí mismo, en consecuencia ni se empeora ni se mejora aquello que se alaba.
69. El valor de un hombre no es más grande que sus ambiciones.
70. Piensa en la belleza de la vida. Mira las estrellas y mírate corriendo detrás de ellas.
71. Si estás molesto por una causa externa, el dolor no se debe a la causa en sí misma, sino al valor que tú le das. Y tienes el poder de revocar ese valor.
72. Acepta las cosas a las que el destino te ata y ama a las personas que el destino te trae, pero hazlo con todo tu corazón.
73. Si alguien es capaz de mostrarme que lo que pienso o hago no es correcto, cambiaré con gusto, puesto que busco la verdad y nunca nadie ha sido herido por la verdad. La persona que se estanca en la ignorancia es la que sale herida.
74. No dejes que el futuro te moleste. Te encontrarás con él, si debes hacerlo, con las mismas armas racionales con las que estás armado para luchar contra el presente.
75. La capacidad natural sin educación, más a menudo ha elevado a un hombre a la gloria y a la virtud, que la educación sin la capacidad natural.
76. Si no es correcto, no lo hagas. Si no es verdad, no lo digas.
77. El objeto de la vida no es estar en el lado de la mayoría, sino escapar de formar parte de los insensatos.
78. Cada vez que estés a punto de señalar un defecto en otra persona, hazte la siguiente pregunta: ¿Qué defecto en mí se parece al que estoy a punto de criticar?
79. Cuando otra persona te culpa o te odia, o las personas te critican, ve hacia sus almas, penetra en las profundidades y observa qué clase de personas son. Te darás cuenta de que no deberías atormentarte pensando en lo que los demás creen de ti.
80. La primera regla es mantener el espíritu en calma. La segunda es ver las cosas frente a frente y saber qué son.
81. Empieza cada día diciéndote: Hoy me encontraré con interferencias, ingratitud, insolencia, deslealtad, mala voluntad y egoísmo, todo ello debido a la ignorancia de los ofendedores, que no distinguen el bien del mal. Pero yo he visto la belleza del bien y la fealdad del mal, y reconozco que el malhechor tiene una naturaleza semejante a la mía, no la misma sangre pero sí la misma mente. Por eso, no puede herirme.
82. Sólo eres un alma que lleva un cadáver a cuestas.
83. Mira hacia el pasado, con sus imperios cambiantes que se alzaron y cayeron, y serás capaz de prever el futuro.
84. La felicidad de los que buscan placer fluctúa con el humor que está fuera de su control.
85. No sueñes con las cosas que no tienes, más bien reconoce las bendiciones de las cosas que sí posees.
86. Piensa que estás muerto. Ya has vivido tu vida. Ahora aprovecha lo que te queda de ella y vívela como se debería. Lo que no transmite luz crea su propia oscuridad.
87. La perfección del carácter es esto: vivir cada día como si fuese el último, sin apresurarse, sin apatía, sin pretensiones.
88. Siempre tienes la opción de no opinar al respecto. No hay necesidad de molestar tu alma por cosas que no puedes controlar. Esas cosas no están pidiéndote que las juzgues. Déjalas en paz.
89. Las personas estamos capacitadas naturalmente para soportar todo lo que nos sucede.
90. Sólo haz lo correcto. Lo demás no importa. Caliente o frío. Cansado o descansado. Despreciado y honrado. Muerto u ocupado con otras tareas. Porque morir también es una de las tareas que debemos cumplir en la vida.
91. Lleva una buena vida. Si hay dioses y son justos, no se preocuparán por qué tan devoto fuiste. En cambio, te darán la bienvenida basándose en las virtudes que has tenido en vida. Si hay dioses pero son injustos, entonces no te gustaría alabarlos. Si no hay dioses, entonces simplemente tu vida habrá terminado pero habrá sido noble y tu recuerdo vivirá en las memorias de los que amas.
92. Qué ridículo y qué extraño es sorprenderse de las cosas que pasan en la vida.
93. Los humanos existen por el bien de los demás. Así que o les enseñas o aprendes a soportarlos.
94. Vuelve a tus sentidos, regresa, despierta otra vez. Ahora que te has dado cuenta de que lo que te molestaba sólo era un sueño, mira la “realidad” como ves tus sueños.
95. Haz lo que debas hacer. Incluso si te desarmas, la mayoría de las personas seguirán haciendo las mismas cosas.
96. Está en tu poder retraerte cada vez que lo desees. La tranquilidad perfecta consiste en el orden de la mente, el reino que te pertenece.
97. Acepta lo que venga tejido en el patrón de tu destino, pues ¿qué podría ser más adecuado para satisfacer tus necesidades?
98. No pierdas el tiempo especulando sobre lo que hacen tus vecinos, a menos de que sea para beneficio mutuo.
99. Si algún hombre me odia, ese es su problema. Mi única preocupación es no hacer o decir nada que merezca ese odio.
100. Que algo te parezca difícil no quiere decir que nadie más sea capaz de lograrlo.
101. En ninguna parte se puede encontrar un lugar más tranquilo y sin problemas que dentro de la propia alma.
102. ¿Es tu reputación lo que te molesta? Pero mira lo rápido que somos olvidados.
103. Lo que es realmente hermoso no necesita más nada.
104. Tus días están contados. Úsalos para abrir las ventanas de tu alma y que entre el sol. Si no lo haces, el sol se pondrá en horizonte y tú con él.
105. La felicidad de los que quieren ser populares depende de los demás.
106. Recuerda agradecido cómo estarías de ansioso si tus posesiones no fueran tuyas.
107. No permitas que tu mente se enajene de las cosas que tienes, sino de las que careces.
108. El abismo del tiempo eterno se traga todo. El vacío de esas manos que aplauden. Las personas que nos aplauden, qué caprichosas son, qué arbitrarias.
109. Sin embargo, la felicidad de los sabios viene de sus actos.
110. El eco de lo que hacemos ahora resuena en la eternidad.
Hasta aquí nuestras frases de Marco Aurelio. Se nota la distancia temporal en la forma pero para nada en el fondo; podrían pertenecer a cualquier dirigente preocupado por su pueblo. ¿Te han parecido interesantes estas máximas? ¿Las conocías todas antes de verlas aquí? ¿Has escuchado otras frases de Marco Aurelio que no hayan aparecido en nuestra lista? Si es así, por favor, no dudes en enviarnos un comentario para contarnos todo lo que se te ocurra sobre el tema: nuevas frases, opiniones sobre las nuestras o sobre el propio Marco Aurelio, lo que sea. Te esperamos.