Sin duda alguna, Mario Benedetti fue un destacado poeta, novelista, dramaturgo, cuentista y crítico relevante de la literatura uruguaya de la segunda mitad del siglo XX, integrante de la Generación del 45, y uno de los personajes que puso sobre el tapete la literatura hispanoamericana. El extenso y maravilloso legado que dejó Benedetti ha logrado deleitar al mundo entero con sus frases de amor hacia la vida, que nos transportan a un mundo lleno de comprensión, sabiduría y añoranza. Y es por ello que hoy, en Frases de la Vida, queremos recordar junto a ti algunas de las mejores frases de Mario Benedetti.

Este genio de la literatura, logró captar la atención del mundo entero con sus obras literarias gracias a su poética plasmación de la vida cotidiana; de hecho, los poemas de Mario Benedetti le convirtieron en un escritor sumamente cercano. Así, todo lector podía conectar con su vida, llena de amor, soledad, felicidad, sufrimiento y melancolía, un seguido de sentimientos que luego incorporaba en sus cuentos, poemas y novelas literarias. Como muestra de esta excelente capacidad, te presentamos a continuación una selección de 140 frases de Mario Benedetti con las que seguro podrás sentirte identificado.

Las mejores frases de Mario Benedetti

1. No te rindas que la vida es eso, continuar el viaje, perseguir tus sueños, destrabar el tiempo, correr los escombros y destapar el cielo. 

Frases de Mario Benedetti, No te rindas que la vida es eso, continuar el viaje, perseguir tus sueños, destrabar el tiempo, correr los escombros y destapar el cielo. 2. Defender la alegría como una trinchera, defenderla del escándalo y la rutina, de la miseria y los miserables, de las ausencias transitorias y las definitivas. 

3. El amor no es repetición. Cada acto de amor es un ciclo en sí mismo, una órbita cerrada en su propio ritual. Es, cómo podría explicarte, un puño de vida.

4. Me gusta la gente capaz de entender que el mayor error del ser humano es intentar sacarse de la cabeza aquello que no sale del corazón.

5. La infancia es un privilegio de la vejez. No sé por qué la recuerdo actualmente con más claridad que nunca. 

6. Mi táctica es hablarte y escucharte, construir con palabras un puente indestructible. Mi táctica es quedarme en tu recuerdo, no sé cómo ni sé con qué pretexto, pero quedarme en vos.

7. El amor es una palabra, un pedacito de utopía. Es todo eso y mucho menos y mucho más. Es una isla, una borrasca, un lago quieto.

8. Cinco minutos son suficientes para vivir una vida entera, así de relativo es el tiempo. 

Frases de Mario Benedetti, Cinco minutos son suficientes para vivir una vida entera, así de relativo es el tiempo. 9. Nacemos tristes y morimos tristes pero en el entretiempo amamos cuerpos cuya triste belleza es un milagro. 

10. Sé que voy a quererte sin preguntas, sé que vas a quererme sin respuestas.

Frases de Mario Benedetti, Sé que voy a quererte sin preguntas, sé que vas a quererme sin respuestas.11. Algunas cosas del pasado desaparecieron pero otras abren una brecha al futuro y son las que quiero rescatar. 

12. Los odios vivifican y estimulan solo si es uno quien los gobierna; destruyen y desajustan cuando son ellos los que dominan. 

13. No hay que prometer nada porque las promesas son horribles ataduras, y cuando uno se siente amarrado, tiende a liberarse. 

14. Hay pocas cosas tan ensordecedoras como el silencio. 

Frases de Mario Benedetti, Hay pocas cosas tan ensordecedoras como el silencio. 15. Creo que la vida es un paréntesis entre dos nadas. Soy un ateo. Creo en un dios personal, el cual es la consciencia, y eso es a lo que tenemos que rendir cuentas cada día. 

16. Cuando tengo preocupaciones, miedos o una historia de amor, tengo la suerte de ser capaz de transformarlo en un poema. 

17. Nunca pensé que en la felicidad hubiera tanta tristeza. 

Frases de Mario Benedetti, Nunca pensé que en la felicidad hubiera tanta tristeza. 18. La seguridad de saberme capaz para algo mejor, me puso en las manos de la postergación, que a fin de cuentas es una arma terrible y suicida. 

19. Y aunque no siempre he entendido mis culpas y mis fracasos, en cambio sé que en tus brazos el mundo tiene sentido. 

20. La muerte se lleva todo lo que no fue, pero nosotros nos quedamos con lo que tuvimos. 

Frases de Mario Benedetti, La muerte se lleva todo lo que no fue, pero nosotros nos quedamos con lo que tuvimos. 21. La incertidumbre es una margarita cuyos pétalos no se terminan jamás de deshojar.

22. Hay menos tiempo que lugar, no obstante, hay lugares que duran un minuto y para cierto tiempo no hay lugar. 

23. En el amor es virtuoso ser fiel más no fanático.

Frases de Mario Benedetti, En el amor es virtuoso ser fiel más no fanático.24. Me gusta el viento, no sé por qué, pero cuando camino contra el viento parece que me borra cosas. Quiero decir, cosas que quiero borrar. 

25. Y para estar total, completa, absolutamente enamorado, hay que tener plena conciencia de que uno también es querido, que uno también inspira amor. 

26. Usted no sabe cómo yo valoro su sencillo coraje de quererme.

27. Cuando creíamos que teníamos todas las respuestas, de pronto, cambiaron todas las preguntas. 

28. Yo amo, tú amas, él ama, nosotros amamos, vosotros amáis, ellos aman. Ojalá no fuese conjugación sino realidad.

Frases de Mario Benedetti, Yo amo, tú amas, él ama, nosotros amamos, vosotros amáis, ellos aman. Ojalá no fuese conjugación sino realidad.29. No sé tu nombre, solo sé la mirada con que me lo dices.

30. Pero en definitiva, ¿qué es lo nuestro? Por ahora, al menos, es una especie de complicidad frente a otros.

31. En ciertos oasis el desierto es sólo un espejismo.

32. Lo que uno quiere de verdad, es lo que está hecho para uno; entonces hay que tomarlo, o intentar. En eso se te puede ir la vida, pero es una vida mucho mejor.

33. A veces me siento infeliz sin un motivo concreto.

34. En este mundo tan codificado con internet y otras navegaciones, yo sigo prefiriendo el viejo beso artesanal que desde siempre comunica tanto.

35. No me tientes, que si nos tentamos no nos podremos olvidar.

36. Porque tú siempre existes dondequiera, pero existes mejor donde te quiero.

37. La realidad es un manojo de problemas sobre los cuales nadie reclama derechos de autor.

38. Acá hay tres clases de gente: la que se mata trabajando, las que deberían trabajar y las que tendrían que matarse.

39. Yo no sé si dios existe, pero si existe, sé que no le va a molestar mi duda.

40. Así estamos, cada uno en su orilla, sin odiarnos, sin amarnos, ajenos.

41. También siento un leve resquemor frente a lo cursi, y a mí lo cursi me parece justamente eso: andar siempre con el corazón en la mano.

42. Tengo la horrible sensación de que pasa el tiempo y no hago nada y nada acontece, y nada me conmueve hasta la raíz.

43. No vayas a creer lo que te cuentan del mundo, ya te dije que el mundo es incontable.

44. Sus labios eran una caricia necesaria, cómo podía haber vivido hasta ahora sin ellos.

45. Un abogado con cartera puede robar más que mil hombres armados.

46. Se oyen pasos de alguien que no llegan nunca.

47. No sé por qué, pero hoy me ha dado por extrañarte, por echar de menos tu presencia.

48. Te he dejado pensando en muchas cosas, pero ojalá pienses un poco en mí.

49. Pedir perdón es humillante y no arregla nada. La solución no es pedir perdón, sino evitar los estallidos que hacen obligatorias las excusas.

50. Lo que más me gusta de vos es algo que no habrá tiempo capaz de quitártelo.

51. Es lindo saber que usted existe.

52. Ella no decía nada. Le gustaba que él le dijera cosas, pero ella callaba. Solo sus manos y sus ojos hablaban y eso bastaba.

53. Puedes venir a reclamarte como eras. Aunque ya no seas tú.

54. Si el corazón se cansa de ver, ¿Para qué sirve?

55. Es claro que lo mejor no es la caricia en sí misma, sino su continuación.

56. En la razón sólo entraran las dudas que tengan llave.

57. Honestidad, ven a mí y aunque quieras no dejaré que me abandones.

58. Más que besarla, más que acostarnos juntos, más que ninguna otra cosa, ella me daba la mano y eso era amor.

59. Una confesión: la soledad ha dejado de herirme.

60. Se despidieron y en el adiós ya estaba la bienvenida.

61. Más que sus ojos, su mirada. Miraba como queriendo decir algo y no diciéndolo.

62. Me gustaría mirar todo de lejos pero contigo.

63. Quizá eso nos haya unido. Tal vez unido no sea la palabra más apropiada. Me refiero al odio implacable que cada uno de nosotros siente por su propio rostro.

64. Que te quede bien claro. Donde acaba tu boca, ahí empieza la mía.

65. Te espero cuando miremos al cielo de noche: tú allá, yo aquí.

66. Que alguien te haga sentir cosas sin ponerte un dedo encima, eso es admirable.

67. Un río de tristeza circula por mis venas, pero me he olvidado de llorar.

68. Sin embargo todavía dudo de esta buena suerte, porque el cielo de tenerte me parece fantasía.

69. Lo cierto es que yo ignoraba que tenía en mí esas reservas de ternura.

70. Es curioso cómo a veces se puede llegar a ser tan inocentemente cruel.

71. La infancia es a veces un paraíso perdido. Pero otras veces es un infierno de mierda.

72. Te espero cuando la noche se haga día, suspiros de esperanzas ya perdidas. No creo que vengas, lo sé.

73. En realidad, sólo existe la dirección que tomamos, lo que puede haber sido ya no vale.

74. Somos tristeza, por eso la alegría es una hazaña.

75. Si habito en tu memoria no estaré solo .

76. Cuando los odios andan sueltos, uno ama en defensa propia.

77. Si uno conociera lo que tiene con tanta claridad, como conoce lo que le falta.

78. Melancolía: manera romántica de estar triste.

79. Todos queremos lo que no se puede, somos fanáticos de lo prohibido.

80. Ya casi es hora de que empiece a dedicarte mi insomnio.

81. Contra el optimismo no hay vacunas.

82. De dos peligros debe cuidarse el hombre nuevo: de la derecha cuando es diestra, de la izquierda cuando es siniestra.

83. Usted tiene todas las condiciones para concurrir a mi felicidad, pero yo tengo muy pocas para concurrir la suya.

84. Después de todo, la muerte solo es un síntoma de la vida.

85. Querido, nuestro matrimonio no ha sido un fracaso, sino algo mucho más horrible: un éxito malgastado.

86. Fíjese que cuando sonríe se le forman unas comillas en cada extremo de su boca. Esa, su boca, es mi cita.

87. La perfección es una pulida corrección de errores.

88. Todas las noches me torturo pensando en ti.

89. Es casi ley, los amores eternos, son lo más breves.

90. La verdadera división de las clases sociales habría que hacerla teniendo en cuenta la hora en que cada uno se tira de la cama.

91. Yo quisiera ser yo, pero un poco mejor.

92. El plan trazado es la absoluta libertad. Conocernos y ver que pasa, dejar que corra el tiempo y revisar. No hay trabas. No hay compromisos.

93. Los sentimientos son inocentes como las armas blancas.

94. Cada vez que te enamores no expliques a nadie nada, deja que el amor te invada sin entrar en pormenores.

95. Una de las cosas más agradables de la vida: ver cómo se filtra el sol entre las hojas.

96. Ojalá que la espera no desgaste mis sueños.

97. Cuando el infierno son los otros, el paraíso no es uno mismo.

98. Posiblemente me quisiera, vaya uno a saberlo, pero lo cierto es que tenía una habilidad especial para herirme.

99. Me explicaron que era una cordial invitación a que me fuera de inmediato.

100. Necesito no caer en el remoto riesgo de necesitarte.

101. Siempre ando de mal genio. Yo qué sé. Como si me sintiera incómodo conmigo mismo.

102. En mi alma hay un pozo y en mi sangre hay un náufrago.

103. La mariposa recordará por siempre que fue gusano.

104. En política latinoamericana la cosa no es poder ni querer sino joder.

105. Se es o no se es, no importa el día.

107. Lo nuestro es ese indefinido vínculo que ahora nos une.

108. Padecen la más horrible variante de la soledad: la soledad del que ni siquiera se tiene a sí mismo.

109. Me aburría de mí mismo, de mi propia paciencia.

110. Que el dolor no me apague la rabia, que la alegría no desarme mi amor.

111. El dolor lo pone a uno exageradamente receptivo.

112. Creen en Dios solo porque ignoran que hace mucho tiempo que Dios ha dejado de creer en ellos.

113. Cuántas palabras, solo para decir que no quiero parecer patético.

114. ¿Qué harías en mi lugar? – En tu lugar no tendría problemas.

115. Mi estilo de querer es ese, un poco reticente, reservando el máximo solo para grandes ocasiones.

116. No es la eternidad pero es el instante, que, después de todo, es su único sucedáneo verdadero.

117. Qué bueno que tengas el valor de ser distinto y no sucumbas al poder unánime.

118. Después de todo, la muerte es solo un síntoma de que hubo vida.

119. Quién lo diría, los débiles de veras nunca se rinden.

120. No te rindas, por favor no cedas, aunque el frío queme, aunque el miedo muerda, aunque el sol se esconda, y se calle el viento, aún hay fuego en tu alma, aún hay vida en tus sueños.

121. Nos resignamos al momento único y feliz. Preferimos perderlo, dejarlo transcurrir sin siquiera hacer el razonable intento de asirlo.

122. Porque la vida es tuya y tuyo también el deseo, porque cada día es un comienzo nuevo, porque esta es la hora y el mejor momento, porque no estás solo, ¡porque yo te quiero!”

123. Cinco minutos bastan para soñar toda una vida, así de relativo es el tiempo.

124. Qué buen insomnio si me desvelo sobre tu cuerpo.

125. La gloria no consiste en no caer nunca, sino más bien en levantarse las veces que sea necesario.

126. Si el corazón se aburre de querer para qué sirve.

127. Un torturador no se redime suicidándose, pero algo es algo.

128. Cómo la necesito. Dios había sido mi más importante carencia. Pero a ella la necesito más que a Dios.

129. Un sociólogo norteamericano dijo hace más de treinta años que la propaganda era una formidable vendedora de sueños, pero resulta que yo no quiero que me vendan sueños ajenos, si no sencillamente que se cumplan los míos.

130. Quizá mi única noción de patria sea esta urgencia de decir Nosotros quizá mi única noción de patria sea este regreso al propio desconcierto.

131. De un tiempo a esta parte el infinito se ha encogido peligrosamente.

132. Sigo en pie por latido por costumbre por no abrir la ventana decisiva y mirar de una vez a la insolente muerte esa mansa dueña de la espera.

133. Cuando éramos niños los viejos tenían como treinta un charco era un océano la muerte lisa y llana no existía.

134. Voy a cerrar los ojos en voz baja voy a meterme a tientas en el sueño. 

135. Mi pesadilla es siempre el optimismo: me duermo débil, sueño que soy fuerte, pero el futuro aguarda.

136. La caricia es un lenguaje si tus caricias me hablan no quisiera que se callen.

137. Las caricias de los sueños que son prodigio y encanto adolecen de un defecto no tiene tacto.

138. Quién hubiera dicho que estos poemas de otros iban a ser míos.

139. Tus ojos son mi conjuro contra la mala jornada te quiero por tu mirada que mira y siembra futuro. 

140. Tengo miedo de verte, necesidad de verte, esperanza de verte, desazones de verte. 

Esperamos que hayas podido conectar con estas frases de Mario Benedetti y que hayas disfrutado tanto de ellas como lo hemos hecho nosotros. Déjanos un comentario con todas tus impresiones, contándonos qué frases de Mario Benedetti te han gustado más y por qué, si conocías al autor, si has leído alguna obra suya e incluso sugiriendo otras frases de Mario Benedetti que conozcas y que no hayas encontrado en nuestra recopilación. Estamos deseando conocerte con mayor profundidad.