Cuando se habla de poesía, especialmente de poesía latinoamericana, uno de los nombres que más resalta es el de Alejandra Pizarnik, una mujer argentina que revolucionó la forma de hacer poesía y que expuso descarnadamente los más emotivos versos surrealistas y melancólicos. Y aunque la tragedia fue una de las protagonistas de sus obras, también lo fue el romanticismo; por eso, en este artículo de Frases de la Vida te presentaremos los poemas de amor de Pizarnik, ideales para obtener una perspectiva más amplia de este sentimiento.

Un ápice de luz en la oscuridad: Poemas de amor de Pizarnik

poemas de amor de Pizarnik

En medio de la recurrente oscuridad que enmarcaba sus poemas y la pulsión de angustia y muerte que se escondía tras sus versos, Alejandra encontró en la poesía un refugio vital en el que escapaba de su fragilidad y de donde emanaba el amor como una herramienta clave para soportar la vida. De ahí que los poemas de amor de Pizarnik sean tan importantes dentro de su obra y convirtiéndola en una de las mujeres poetas más relevantes de la historia.

1. La enamorada

En este primero de los poemas de amor de Pizarnik converge el natural desespero luego de un rechazo amoroso; a través de potentes imágenes, la poeta nos muestra la desesperación y la angustia, desde un estilo melancólico y una poesía en constante búsqueda por explorar la complejidad de las emociones humanas.

 

Esta lúgubre manía de vivir,

esta recóndita humorada de vivir

te arrastra Alejandra no lo niegues.

Hoy te miraste en el espejo

y te fue triste estabas sola

la luz rugía el aire cantaba

pero tu amado no volvió.

Enviarás mensajes, sonreirás,

tremolarás tus manos así volverá

tu amado tan amado.

Oyes la demente sirena que lo robó

el barco con barbas de espuma

donde murieron las risas

recuerdas el último abrazo

oh nada de angustias

ríe en el pañuelo llora a carcajadas

pero cierra las puertas de tu rostro

para que no digan luego

que aquella mujer enamorada fuiste tú

te remuerden los días

te culpan las noches

te duele la vida tanto tanto

desesperada ¿adónde vas?

desesperada ¡nada más!

2. Quien alumbra

Continuamos con los poemas de amor de Pizarnik con unos versos cortos, pero de una belleza incomparable. En Quien alumbra Pizarnik revela la magia pura del amor, la capacidad de transformar nuestro mundo y establecerse tan profundamente en nuestra mente que no exista manera de soltarlo.

Cuando me miras

mis ojos son llaves,

el muro tiene secretos,

mi temor palabras, poemas.

Solo tú haces de mi memoria

una viajera fascinada,

un fuego incesante.

3. Más allá del olvido

Más allá de la melancolía propia de los poemas de esta poeta argentina, en esta obra Alejandra nos invita a concentrarnos en la brillante capacidad del amor de impactar todo aquello que nos rodea y de vivir en el recuerdo. Es un amor que nunca muere, que sobrevive más allá del olvido.

Alguna vez de un costado de la luna

verás caer los besos que brillan en mí

las sombras sonreirán altivas

luciendo el secreto que gime vagando

vendrán las hojas impávidas que

algún día fueron lo que mis ojos

vendrán las mustias fragancias que

innatas descendieron del alado son

vendrán las rojas alegrías que

burbujean intensas en el sol que

redondea las armonías equidistantes en

el humo danzante de la pipa de mi amor.

4. Amantes

Nada más pasional y romántico que los versos que conforman este siguiente de los poemas de amor de Pizarnik. En Amantes, la poeta refleja esa urgencia desesperada por transformarse frente al amor, por abrirse a él y sentir todo su poder.

Una flor

no lejos de la noche

mi cuerpo mudo

se abre

a la delicada urgencia del rocío.

5. Presencia

Aunque los poemas de amor de Pizarnik no fueron los más recurrentes, en este el sentimiento se refleja como un camino de salvación frente a la tristeza. No se refiere necesariamente al amor romántico, sino al amor entre amigos y familiares, a ese amor esencial que viene con nosotros desde nuestro nacimiento.

Tu voz

en este no poder salirse las cosas

de mi mirada

ellas me desposeen

hacen de mí un barco sobre un río de piedras

si no es tu voz

lluvia sola en mi silencio de fiebres

tú me desatas los ojos

y por favor

que me hables

siempre.

La combinación de aquello erótico y romántico con el amor ingenuo e inherente a la naturaleza humana es lo que hace que los poemas de amor de Pizarnik logren abordar con tanta profundidad y certeza la complejidad del sentimiento. La última de las poetas malditas nos dejo un legado poético inigualable que abarcó gran cantidad de los escenarios posibles de la existencia.

Y tú, ¿conocías estos poemas de Pizarnik? ¿cuál de ellos llamó más tu atención? ¡Te leemos!