Anatole François Thibault, más conocido simplemente como Anatole France, nació en París en 1844 y falleció en Saint-Cyr-sur-Loire en 1924 a la edad de 80 años. Es conocido por ser uno de los escritores franceses más influyentes de la literatura francófona de finales del siglo XIX y principios del XX, además de obtener el Premio Nobel de Literatura en 1921. Las frases de Anatole France son tan amplias como su obra literaria, en ellas encontramos algunos de los pensamientos más profundos y críticos del autor.
Las frases de Anatole France nos muestran la personalidad de un escritor comprometido con su tiempo y con los problema sociales de su época. Sin embargo, al mismo tiempo, nos muestran una mente que era consciente de las limitaciones de la realidad, así como de la importancia de la educación para cambiar la sociedad y conseguir encontrar la felicidad en esta vida.
90 Frases de Anatole France | Una de las voces francesas imprescindibles
1. El bien público está formado por un buen número de males particulares.
2. Un buen retrato es una biografía pintada.
3. Sabed sufrir: sabiendo sufrir, se sufre menos.
4. Cuando se ve una cosa bella, se quiere poseerla. Es una inclinación natural que las leyes han previsto.
5. No hay gobierno popular. Gobernar es crear descontentos.
6. Sin mentiras la humanidad moriría de desesperación y aburrimiento.
7. Nunca se da tanto como cuando se dan esperanzas.
8. Llamamos peligrosos a los que poseen un espíritu contrario al nuestro, e inmorales a los que no profesan nuestra moral.
9. En el arte, como en el amor, basta con el instinto.
10. Cada cual tiene la edad de sus emociones.
11. La utopía es el principio de todo progreso y el diseño de un futuro mejor.
12. El porvenir es un lugar cómodo para colocar los sueños.
13. De todos los vicios que pueden malograr a un estadista, la virtud es la más funesta: empuja al crimen.
14. Toda la justicia social descansa en estos dos axiomas: el robo es punible y el producto del robo es sagrado.
15. Juzgamos las acciones humanos no por lo que son, sino por el disgusto o el placer que lo causan.
16. La vida nos enseña que sólo somos felices a costa de alguna ignorancia.
17. No se ama verdaderamente sino cuando se ama sin razón.
18. Prefiero los errores del entusiasmo a la indiferencia de la sabiduría.
19. La oscuridad nos envuelve a todos, pero mientras el sabio tropieza en alguna pared, el ignorante permanece tranquilo en el centro de la estancia.
20. La guerra y el romanticismo: ¡plagas espantosas!
21. Los católicos masacraron reformados; los reformados masacraron a los católicos: en eso consistieron los primeros progresos de la liberta de pensamiento.
22. El futuro está oculto detrás de los hombres que lo hacen.
23. Si exagerásemos nuestras alegrías, como hacemos con nuestras penas, nuestros problemas perderían importancia.
24. La moral es la regla de las costumbres.
25. Cuando se alza un poder ilegítimo, para legitimarlo, basta reconocerlo.
26. No perdamos nada del pasado. Sólo con el pasado se forma el porvenir.
27. Una cosa sobre todo hace sugestivo el pensamiento humano: es la inquietud.
28. La mujer es embellecida por el beso que ponéis sobre su boca.
29. El arte de la guerra consiste en ordenar las fuerzas de tal modo que no puedan huir.
30. Un diccionario es un universo en orden alfabético.
31. La moral descansa naturalmente en el sentimiento.
32. Ateniéndonos a la costumbre pasaremos generalmente por hombres honrados, porque se toma por hombres honrados a los que lo hacen todo igual que los demás.
33. La timidez es un gran pecado contra el amor.
34. La justicia es la administración de la fuerza.
35. No se sabe quien goza más; si la mujer cuando se casa o el hombre cuando enviuda.
36. En todo lo que nos rodea y en todo lo que nos mueve debemos advertir que interviene en algo la casualidad.
37. Si todas las injusticias fuesen reparadas en este mundo, no se hubiera imaginado nunca otro para repararlas.
38. Uno cree que muere por la patria y muere por los industriales.
39. De todas las aberraciones sexuales, la peor es la castidad.
40. Las verdades que revela la inteligencia permanecen estériles. Sólo el corazón es capaz de fecundar los sueños.
41. Lo que los hombres llaman civilización es el estado actual de las costumbres y lo que llaman barbarie son los estados anteriores.
42. Los autores de revoluciones no pueden sufrir que otros las hagan después de ellos.
43. La verdadera historia es la de las máximas y las opiniones, más que la de las guerras y los tratados.
44. Los hombres exigen al amor que se revista de formas y colores; han de ver lo que aman. Las mujeres sólo piden sensaciones al amor; saben amar como ciegas.
45. No seas jamás humilde con los soberbios, ni soberbio con los humildes.
46. La independencia del pensamiento es la más orgullosa aristocracia.
47. La mujer obedece ciegamente al que se apodera de sus sentidos.
48. La vida resulta deliciosa, horrible, encantadora, espantosa, dulce, amarga; y para nosotros lo es todo.
49. La historia me ha enseñado que sólo aparecen los actos heroicos en las derrotas y en los desastres.
50. Su experiencia, como tantas veces sucede, le hizo desconocer la verdad.
51. La mayoría de los hombres que no saben qué hacer de esta vida, quieren otra que no termine nunca.
52. No es fácil derribar a los autócratas, pero en cuanto se tambalean sus más firmes sostenes los abandonan.
53. Existir no implica en modo alguno la sustancia, sólo significa el lazo que une al atributo con el sujeto. Expresa una relación, y nada más.
54. La inocencia es más a menudo una felicidad que una virtud.
55. ¿A dónde me conduces, imaginación? Porque sin duda es dañino pensar, y la verdadera sabiduría consiste en no pensar nada.
56. Gobernar siempre quiere decir hacer descontentos.
57. Regocíjate Dios triste a quien agrada el sufrimiento.
58. El hombre es propenso al error y puede engañarse; pero un sable se inclina siempre hacia lo justo.
59. Cuando el hombre que declara lleva un sable, es al sable a quien debe oirse, no al hombre.
60. Todos los orígenes tienen para nosotros el interés del misterio.
61. La vejez conduce a una tranquilidad indiferente que asegura la paz interior y exterior.
62. Concebía una idea muy elevada de la justicia por la ostentación que la rodeaba.
63. Pedir una moral a la ciencia es arriesgarse a sufrir crueles desengaños.
64. La justicia no es más que el sueño de algunos imbéciles. La injusticia es el pensamiento mismo de Dios.
65. Lo admirable no es que existan las estrellas sino que el hombre haya podido dar cuenta de su existencia.
66. El Cristo del Evangelio es un demagogo. Por añadidura, padeció un suplicio que desde hace mil novecientos años todos los pueblos cristianos consideran como un grave error judicial.
67. Las victorias de los pueblos siempre son debidas a la inteligencia de los generales y al valor de los soldados; y las derrotas a la fatalidad.
68. Los hombres ejercen el poder divino de abrir todas las puertas. Yo sólo puedo abrir algunas. Las puertas son gigantescos ídolos que no ceden gustosos a las mañas de los perros.
71. El velo de las viudas se apolilla siempre por el nuevo amor que nace entre sus pliegues.
72. Así como un día bien empleado nos procura un buen sueño, una vida bien vivida nos proporciona una muerte tranquila.
73. La existencia sería intolerable si no hubiera ensueños.
74. Entonces, como no estudiaba nada, aprendía mucho.
75. Impopularidad tiene asegurada todo el que goza de popularidad.
76. El pasado es la única realidad humana. Todo lo que es, es pasado.
77. Pues no hay más remedio que matar el tiempo, y aun esto, si uno lo piensa, es el único empleo de la vida.
78. Si hubiéramos de destruir todos los sueños y visiones de los hombres, la tierra perdería su forma y su colorido, y nos adormeceríamos en la más triste estolidez.
79. La ironía es el júbilo y la alegría de la sabiduría.
80. Es cierto que el amor conserva la belleza y que la cara de las mujeres se nutre de caricias, lo mismo que las abejas se nutren de miel.
81. Existe en todos nosotros un fondo de humanidad mucho menos variable de lo que se cree.
82. Es preciso elevarse con las alas del entusiasmo. Si se razona, no se volará jamás.
83. Me gusta divagar; no hay cosa más agradable ni más útil.
84. Observamos que en Francia, casi siempre, los críticos musicales son sordos y los críticos de arte ciegos. Eso les permite el recogimiento que necesitan las ideas estéticas.
85. Es posible que me hubiera aniquilado la tristeza, si no me reanimase la facilidad que tenía para descubrir la parte cómica de las cosas.
86. Afortunadamente, no tenemos por qué parecernos a nuestros retratos.
87. Una tontería repetida por 36 millones de bocas, no deja de ser una tontería.
88. El cristianismo ha hecho mucho por el amor convirtiéndolo en pecado.
89. La utopía es el principio de todo progreso y el diseño de un futuro mejor.
90. Un buen crítico es aquel que narra las aventuras de su propia alma entre las obras maestras.
¿Qué te han parecido estas frases de Anatole France? ¿Conocías su obra? ¿Has leído algunas de sus novelas o poemas? ¿Cuál de estas frases de Anatole France te ha gustado más? ¡Déjanos tus opiniones en los comentarios! ¡Nos encantará conocerlas!