Miguel de Cervantes Saavedra, ¿has leído a este famoso escritor? Entre sus obras encontramos novelas, drama y poesía. ¿Quieres conocer algunas de las mejores frases de Cervantes? En Frases de la vida las hemos recopilado para ti. Este escritor nació en España el 29 de septiembre de 1547 y murió el 22 de Abril de 1616. Sigue siendo muy famoso en todo el mundo por su reconocida obra Don Quijote de la Mancha.

La primera parte  del libro Don Quijote de la Mancha apareció en 1605 y su éxito no se hizo esperar, aunque no resolvió los problemas económicos que aquejaban a Cervantes. Algunas de las frases de Cervantes demuestran sus problemas. En 1615, unos meses antes de su muerte, envió a la imprenta el segundo tomo completado de  su obra, el cual le dio lugar como uno de los grandes escritores de la historia, así mismo como fundador de la novela en el sentido moderno de la palabra. Algunas de las frases de El Quijote, pero también de otras obras, están en esta selección de Frases de Cervantes.

El Quijote es una sátira de las novelas de caballerías, es todo un cuadro tragicómico de la vida donde explora las profundidades del alma a través de dos personajes totalmente opuestos; el iluminado don Quijote y su prosaico escudero Sancho Panza. Además del Quijote de la Mancha, el Manco de Lepanto, como se conocía a Cervantes, tiene otras obras muy importantes como La Galatea y Los Trabajos de Persiles y Sigismunda, todo un legado. Hoy te invitamos a disfrutar estas frases de Cervantes para que recrees tu mente y tu corazón ¡aquí vamos!

Las 140 mejores frases de Cervantes

1. Más quiero ser malo con esperanza de ser bueno, que bueno con el propósito de ser malo.

2. Por la calle del “ya voy” se va a la casa del “nunca”

3. Confía en el tiempo, que suele dar dulces salidas a muchas amargas dificultades.

4. ¡Oh, memoria, enemiga mortal de mi descanso!

5. Una retirada no es una derrota.

6. Confía en el tiempo, que suele dar dulces salidas a muchas amargas dificultades.

7. Si los celos son señales de amor, es como la calentura en el hombre enfermo, que el tenerla es señal de tener vida, pero vida enferma y mal dispuesta.

8. No desees y serás el hombre más rico del mundo.

9. ¿Qué locura o qué desatino me lleva a contar las ajenas faltas, teniendo tanto que decir de las mías?

10. La verdad adelgaza pero no quiebra, y siempre anda sobre la mentira como el aceite sobre el agua.

11. No hay recuerdo que el tiempo no borre ni pena que la muerte no acabe.

12. La falsedad tiene alas y vuela, y la verdad la sigue arrastrándose, de modo que cuando las gentes se dan cuenta del engaño ya es demasiado tarde.

13. Más vale la pena en el rostro que la mancha en el corazón.

14. Aún entre los demonios hay unos peores que otros, y entre muchos malos hombres suele haber alguno bueno.

15. Puede haber amor sin celos, pero no sin temores.

16. Al poseedor de las riquezas no le hace dichoso el tenerlas, sino el gastarlas, y no el gastarlas como quiera, sino el saberlas gastar.

17. Ayer lloraba el que hoy ríe y hoy llora el que ayer rió.

18. Entre los pecados mayores que los hombres comenten, aunque algunos dicen que es la soberbia, yo digo que es el desagradecimiento, ateniéndome a lo que suele decirse: que de los desagradecidos está lleno el infierno.

19. Señor, las tristezas no se hicieron para las bestias, sino para los hombres; pero si los hombres las sienten demasiado, se vuelven bestias.

20. Cada uno es artífice de su propia aventura.

21. El amor y la afición con facilidad ciegan los ojos del entendimiento.

22. Por la libertad, así como por la honra, se puede y debe aventurar la vida.

23. Mientras se gana algo no se pierde nada.

24. Quien canta, sus males espanta.

25. Alguno se estima atrevido, cuando con otros se compara. Algunos creo que hubo tan discretos que no acertaron a compararse sino a sí mismos.

26. Las acciones que ni mudan ni alteran la verdad de la historia, no hay para que escribirlas, se han de redundar en menosprecio del señor de la historia.

27. La abundancia de las cosas, aunque sean buenas, hace que no se estimen, y la carestía, aún de las malas, se estima en algo.

28. Hacer bien a villanos es echar agua en el mar.

29. La libertad, Sancho, es uno de los más preciosos dones que a los hombres dieron los cielos; con ella no pueden igualarse los tesoros que encierran la tierra y el mar.

30. El que no sabe gozar de la aventura cuando le viene, no se debe quejar si se le pasa.

31. La alabanza tanto es buena cuanto es bueno el que la dice, y tanto es mala cuando es malo y vicioso el que alaba.

32. Ninguna ciencia, en cuanto a ciencia, engaña; el engaño está en quien no la sabe.

33. De gente bien nacida es agradecer los beneficios que recibe.

34. Come poco y cena menos, que la salud de todo el cuerpo se fragua en la oficina del estómago.

35. El que lee mucho y anda mucho, ve mucho y sabe mucho.

36. Sé lento con la lengua y rápido con el ojo.

37. Cada uno es como Dios le hizo, y aún peor muchas veces.

38. Tal vez en la llaneza y en la humildad suelen esconderse los regocijos más aventajados.

39. El año que es abundante de poesía, suele serlo de hambre.

40. Promesas de enamorados, por la mayor parte son ligeras de prometer y muy pesadas de cumplir.

41. En los grandes peligros, la poca esperanza de venderlos saca del ánimo desesperada fuerza.

42. No seas ni siempre riguroso ni siempre blando y escoge entre estos dos extremos; que en ello está el punto de la discreción.

43. Un buen arrepentimiento es la mejor medicina que tienen las enfermedades del alma.

44. Por eso juzgo y discierno, por cosa cierta y notoria, que tiene el amor su gloria a las puertas del infierno.

45. Las venganzas castigan, pero no quitan culpas.

46. El hacer el padre por su hijo es hacer por sí mismo.

47. Dad crédito a las obras y no a las palabras.

48. Pocas o ninguna vez se cumple con la ambición que no sea con daño de tercero.

49. Sé breve en tus razonamientos, que ninguno hay gustoso si es largo.

50. Amor y deseo son dos cosas diferentes; que no todo lo que se ama se desea, ni todo lo que se desea se ama.

51. Donde una puerta se cierra, otra se abre.

52. El andar las tierras y comunicar con diversas gentes hace a los hombres discretos.

53. ¿No sabes tú que no es valentía la temeridad?

54. En el arte de la marinería más sabe el más simple marinero que el mayor letrado del mundo.

55. En las desventuras comunes se reconcilian los ánimos y se estrechan las amistades.

56. Porque ni el bien ni el mal pueden durar para siempre; y así como el mal ha durado mucho tiempo, el bien ahora debe estar cerca.

57. No hay en la tierra, conforme a mi parecer, contento que se iguale a alcanzar la libertad perdida.

58. Siempre los ricos que dan en liberales hallan quien canonice sus desafueros y califique por buenos sus malos gustos.

59. Y la que es deseosa de ver, también tiene deseos de ser vista.

60. Un caballero se avergüenza de que sus palabras sean mejores que sus hechos.

61. Tanto más fatiga el bien deseado cuanto más cerca está la esperanza de poseerlo.

62. El amor junta los cetros con los cayados; la grandeza con la bajeza; hace posible lo imposible; iguala diferentes estados y viene a ser poderoso como la muerte.

63. Pero tiempo vendrá en que seamos si ahora no somos.

64. Verdaderamente nací para ser un ejemplo de infortunio y un objetivo al que apuntan las flechas del adversario.

65. ¿Es posible que vuestra merced no sabe que las comparaciones que se hacen de ingenio a ingenio, de valor a valor, de hermosura a hermosura y de linaje a linaje son siempre odiosas y mal recibidas?

66. El ingenio y el humor no residen en mentes lentas.

67. Oficio que no da de comer a su dueño, no vale dos habas.

68. Aquellos que juegan con gatos deben esperar ser arañados.

69. Para alcanzar lo imposible, uno debe intentar lo absurdo.

70. Más vale un toma que dos te daré.

71. Bebe moderadamente, porque la embriaguez no guarda ningún secreto ni cumple una promesa.

72. Sea moderado tu sueño, que el que no madruga con el sol, no goza del día.

73. Pudor es un encanto que duplica los encantos de la hermosura.

74. La razón de la sinrazón con la que tratas mi razón, así se debilita mi razón de que con razón me quejo de tu belleza.

75. No hubo abrazos, porque donde hay un gran amor a menudo hay poca representación.

76. De las miserias suele ser alivio una compañía.

77. Nunca el consejo del pobre, por bueno que sea, es admitido.

78. No hay libro tan malo que no tenga algo bueno.

79. Venturoso aquel a quien el cielo dio un pedazo de pan, sin que le quede obligación de agradecérselo a otro que al mismo cielo.

80. En la lengua consisten los mayores daños de la vida humana.

81. La ingratitud es hija de la soberbia.

82. Los buenos artistas imitan la naturaleza; los malos, la vomitan.

83. La necesidad, según se dice, es maestra en sutilizar el ingenio.

84. Porque la esperanza siempre nace al mismo tiempo que el amor.

85. Sabe más el tonto en su casa, que el sabio en la ajena.

86. La verdad puede ser estirada, pero nunca se rompe, y siempre surge por encima de las mentiras, como el aceite flota sobre el agua.

87. No hay ningún camino que no se acabe, como no se le oponga la pereza y la ociosidad.

88. La pluma es la lengua del alma.

89. Yo no soy bueno para palacio, porque tengo vergüenza y no sé lisonjear.

90. Al bien hacer jamás le falta premio.

91. Donde reina la envidia no puede vivir la virtud ni donde hay escasez de liberalidad.

92. La senda de la virtud es muy estrecha y el camino del vicio, ancho y espacioso.

93. Solo una cosa tiene mala el sueño, según he oído decir, y es que se parece a la muerte, pues de un dormido a un muerto hay muy poca diferencia.

94. Más vale una palabra a tiempo que cien a destiempo.

95. Las heridas recibidas en la batalla otorgan honor, no se lo quitan.

96. Donde hay fuerza de hecho, se pierde cualquier derecho.

97. No ames lo que eres, sino lo que puedes llegar a ser.

98. No busques en nidos de antaño, pájaros volando.

99. El sueño es el alivio de las miserias para los que las sufren despiertos.

100. Esta que llaman por ahí Fortuna es una mujer borracha y antojadiza, y sobre todo, ciega, y así no ve lo que hace, ni sabe a quien derriba.

101. No puede ser bueno aquél que nunca ha amado.

102. Como no estás experimentado en las cosas del mundo, todas las cosas que tienen algo de dificultad te parecen imposibles.

103. Haz que tu negocio sea conocerte a ti mismo, que es la lección más difícil del mundo.

104. ¡Oh envidia, raíz de infinitos males y carcoma de las virtudes!

105. El que larga vida vive mucho mal ha de pasar.

106. Más vale el buen nombre que las muchas riquezas.

107. El retirarse no es huir, ni el esperar es cordura, cuando el peligro sobrepuja a la esperanza.

108. La figura de la muerte, en cualquier traje que venga, es espantosa.

109. Andan el pesar y el placer tan apareados que es simple el triste que se desespera y el alegre que se confía.

110. No hay pecado tan grande, ni vicio tan apoderado que con el arrepentimiento no se borre o quite del todo.

111. Al que mal vive, el miedo le sigue.

112. Nunca dejes de suplicar por lo que tienes el poder de ganar.

113. Encomiéndate a Dios de todo corazón, que muchas veces suele llover sus misericordias en el tiempo que están más secas las esperanzas.

114. Amistades que son ciertas nadie las puede turbar.

115. La música compone los ánimos descompuestos y alivia los trabajos que nacen del espíritu.

116. El agradecimiento que sólo consiste en el deseo es cosa muerta, como es muerta la fe sin obras.

117. En la tardanza dicen que suele estar el peligro.

118. La mujer ha de ser dueña, y parecerlo, que es más.

119. Los satisfechos, los felices, no aman; se duermen en la costumbre.

120. El amor es invisible y entra y sale por donde quiere, sin que nadie le pida cuenta de sus hechos.

121. La poesía tal vez se realza cantando cosas humildes.

122. Los delitos llevan a las espaldas el castigo.

123. La buena y verdadera amistad no debe ser sospechosa en nada.

124. Las armas tienen por objeto y fin la paz, que es el mayor bien que los hombres pueden desear en esta vida.

125. Dos linajes solos hay en el mundo, como decía una abuela mía, que son el tener y el no tener.

126. La belleza del cuerpo muchas veces es indicio de la hermosura del alma.

127. La rabia de los celos es tan fuerte que fuerza a hacer cualquier desatino.

128. No puede haber gracia donde no hay discreción.

129. Los celos se engendran entre los que bien se quieren, del aire que pasa, del sol que toca y aun de la tierra que se pisa.

130. Me moriré de viejo y no acabaré de comprender al animal bípedo que llaman hombre, cada individuo es una variedad de su especie.

131. No hay cosa más excusada y aún perdida, que el contar al miserable sus desdichas, mientras tiene el pecho colmado de contentos.

132. Preguntóle uno qué haría para no tener envidia a nadie. Respondióle: -Duerme; que todo el tiempo que durmieres serás igual al que envidias.

133. Bebo cuando tengo gana, y cuando no la tengo y cuando me lo dan, por no parecer o melindroso o malcriado.

134. Lo que el cielo tiene ordenado que suceda, no hay diligencia ni sabiduría humana que lo pueda prevenir.

135. Procura ser tan discreto, que no apures los pensamientos ajenos, ni quieras saber más de nadie que aquello que quisiere decirte.

136. No estamos obligados a castigar a los que nos ofenden, sino a aconsejarles la enmienda de sus delitos.

137. Sábete, Sancho, que no es un hombre más que otro si no hace más que otro.

138. Y verá el mundo que tiene contigo más fuerza la razón que el apetito.

139. Sobre el cimiento de la necedad, no asienta ningún discreto oficio.

140. La poesía es amiga de la soledad, las fuentes la entretienen, los prados la consuelan, los árboles la desenojan, las flores la alegran, y, finalmente, deleita y enseña a cuantos con ella comunican. 

Y hasta acá ha llegado nuestra selección de frases de Cervantes ¿Cuál frase te ha gustado más? ¡Hay unas muy hermosas! Si no has leído a este escritor, considerado la máxima figura de la literatura española, deberías darle una oportunidad, su principal obra es una de las mejores de la literatura universal, además de ser el libro más editado y traducido de la historia después de la Biblia ¿Qué esperas? ¡Anímate! Además, si te han gustado estas frases de Cervantes, no dejes de ver estas bellas frases de Franz Kafka que perduran en el tiempo ¡seguro te encantarán!