En los libros de Charles Dickens que exploraremos en este nuevo artículo de Frases de la Vida podemos encontrar una atinada ligazón entre crítica social, sátira, humor, amor y sincero nacionalismo. Una mezcla que se evidencia en la siguiente recopilación de sus mejores obras. ¡Acompáñanos a redescubrir la narrativa de este autor universal!
Charles Dickens es, sin lugar a dudas, uno de los más grandes y prolíficos escritores de lengua inglesa de todos los tiempos. Su narrativa resulta es atractiva y sugerente, puesto que nos permite introducirnos en una época tan particular como curiosa. Se le puede considerar como un cronista de la sociedad londinense en la época de la Reina Victoria y su estilo le ha cultivado un merecido lugar en la historia de la literatura.
Creador de seres cómicamente repulsivos, el británico publicó historias que continúan siendo leídas y disfrutadas por lectores alrededor del mundo. Además del éxito póstumo, el autor gozó de grandes elogios en vida y muchos escritores de renombre lo han considerado una de las principales figuras literarias de la historia, entre ellos, George Orwell, León Tolstói y Tom Wolfe. Muchas de sus obras fueron adaptadas a la pantalla grande, y la magia de los personajes dickensianos nos acompañará por tiempo indefinido. ¡Continúa leyendo para conocerlos mejor!
Los mejores libros de Charles Dickens
1. David Copperfield (1850)
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Una novela autobiográfica señalada por el propio autor como su “hijo preferido”. La misma hace referencia al crecimiento y desarrollo de la personalidad desde una narración testimonial. Descubrimos una obra muy completa pero, al mismo tiempo, intimista, en la que las pasiones y desenfrenos de la juventud encuentran su cauce en la autodisciplina.
Floreciendo en el ambiente de la era victoriana, esta obra retrata la vida de un adolescente llamado David Copperfield y su arremolinado tránsito hacia la madurez. Los personajes, como en casi todas las producciones del autor, se pueden colocar en categorías muy específicas de las cuales irán saliendo en la medida en la que experimentan situaciones críticas. Especialmente en la consciencia del protagonista, amanece el descubrimiento de que los impulsos no deben controlar nuestras vidas.
2. Tiempos difíciles (1854)
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Como hemos señalado anteriormente, los libros de Charles Dickens suponen una combinación de sátira y crítica social, y ninguno es más directo en este sentido que Tiempos Difíciles. Éste resulta en una perfecta descripción de la vida de grupos contrapuestos, en un periodo en el que la industrialización se abre camino en la vida económica del Imperio.
La novela refleja la vida dura y comprometida con el trabajo de la clase obrera en contraposición con la distendida y desentendida de los dueños de las fábricas al norte de Inglaterra. Es notable que en esta narración el telón de fondo no sea Londres, sino una ciudad ficticia en la que ocurren los acontecimientos narrados. Es posible que Dickens haya intentado una generalización para identificar a todo el imperio. Como punto de equilibrio entre ambos estratos, nos presenta a la familia del circo en un indiscutible tono irónico que la identifica.
3. La tienda de antigüedades (1841)
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En los libros de Charles Dickens abundan personajes arquetípicos: los buenos y extremadamente tontos, y los malvados cercanos a lo diabólico. En esta novela, alcanzará cuotas de sentimentalismo basadas precisamente en las características de sus personajes, extremos en sus condiciones.
Nell y su abuelo, en su tienda de antigüedades, se encuentran con el desalmado Quilp, quien aprovecha la tendencia a la ludopatía del segundo para despojarlos de su casa y de su sustento. De esta forma, comienza una aventura de búsqueda y pérdida constante, con una trama que se constituye a partir de la maldad manifiesta de Quilp y el contrapeso del resto de los personajes. En su momento, representó un ejemplo de la novela sensible victoriana.
4. Nicholas Nickleby (1839)
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En esta ocasión, el novelista británico nos presenta un personaje desafortunado que debe esforzarse por demostrar que es mucho más de lo que aparenta. El tono es humorístico y satírico, e intenta reflejar una sociedad en la cual el estilo de vida está sujeto a las consideraciones del poder y el dinero.
El protagonista se ve forzado a trabajar para mantener a su familia debido a la temprana muerte de su padre. En la Inglaterra victoriana, este papel no es una elección, sino una obligación que mantiene a Nicholas a la deriva y que habilita el encuentro con personajes aviesos como su tío o el director del colegio al cual presta sus servicios como tutor. Una obra que refleja perfectamente el estilo sensible de Dickens.
5. Nuestro Amigo Común (1864)
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Nos encontramos frente a la última novela entre los libros de Charles Dickens, considerada por muchos críticos como su mejor trabajo desde diversas perspectivas. Uno de los elogios centrales es dirigido a la complejidad y descripción de sus personajes, que adoptan tonos morales que los hacen cambiar y evolucionar en un mundo dominado por el dinero y por todo aquello que éste pueda suscitar en los hombres.
En la novela, un heredero es dado por muerto y su fortuna pasa a manos de un sirviente analfabeto. En el camino a su resurrección moral, el protagonista prefiere ocultarse de la mirada de la sociedad a la que pertenece y de la cual desconfía. De esta manera, Dickens acaba identificando la realidad de una nación enferma de codicia e inmoralidad, aunque maquillada hábilmente por prejuicios y apariencias. Crítica, y producto de la decepción que acompaña su vejez, Nuestro amigo común es, sin lugar a dudas, uno de los mejores libros de Charles Dickens.
6. Los papeles póstumos del Club Pickwick (1837)
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Algunos críticos, sobre todo ingleses, consideran este como el mejor de los libros de Charles Dickens, tanto por su redondez y compleja visión de los personajes, como por la descripción del ánimo de una ciudad que, anteriormente, no era muy conocida para los propios londinenses. En efecto, se trata de un mundo estratificado en el que cada grupo parece correr por su lado, sin interesarse en lo más mínimo por el otro.
De esta manera, Dickens aprovecha como anécdota propiciatoria la vida de los integrantes de un club “snob” de la época centrado en la filantropía, pero sin mucho tino ni conocimiento en torno de sus objetivos reales. Es una sátira perfecta sobre la sociedad londinense, particularmente en relación a los ricos y poderosos que no saben qué hacer con su tiempo.
7. Dombey e hijo (1848)
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Un alegato contra el proceso de industrialización y la manera en la cual el mismo acaba progresivamente con la vida bucólica de la Inglaterra victoriana. En esta obra se presenta un marco temático de lo más interesante, que incluye el desamor paterno, la traición filial, el orgullo y la venganza.
La pérdida de un heredero varón crea un clima personal inestable en Dombey, quien decide alejar a su única hija de su lado a pesar de la lucha permanente de esta por ganar su afecto. Esta decisión trae consigo consecuencias trágicas: un suicidio, un naufragio y la traición, aparejados de pérdida de la imagen pública del mismo Dombey. Al final, y al igual que en casi todas las obras de Dickens, triunfa la bondad, pues la redención, el perdón y el amor paterno filial ponen fin al insoportable sufrimiento.
8. Barnaby Rudge (1841)
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A mitad de camino entre la burla y la sátira social de la que tanto gustaba, este es uno de los libros de Charles Dickens menos populares y de peor recepción para la crítica literaria. Sin embargo, posee un indiscutible valor por la descripción de los personajes y el retrato acertado de un periodo histórico.
El telón de fondo es la lucha religiosa desatada en Inglaterra contra los católicos y las funestas consecuencias de la misma en la vida británica. Existen algunos personajes emblemáticos, como la señora Miggs o Simon Tappertit, que afloran para dar un poco de color a una obra que peca de inconsistente con la grandilocuencia de Dickens. Sin embargo, ninguna recopilación estaría completa sin esta novela que llamó la atención de Edgar Allan Poe y que les permitió una cordial amistad transoceánica.
9. Historia de dos ciudades (1845)
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Al contrario de la anterior novela histórica, Barnaby Rudge, este es, entre los libros de Charles Dickens, el mejor logrado desde la perspectiva descriptiva y política. Celebrada y trasladada a las pantallas del cine y la televisión, presenta un periodo histórico que reúne dos ciudades en una confrontación que nunca se hizo tan evidente.
La historia gira en torno a una Francia pre-revolucionaria y una Londres pasiva y un tanto hipócrita, que Dickens intenta retratar con precisión. En este escenario, las pasiones se desatan cuando el interés del siempre presente personaje malvado se centra en la indefensa dama en apuros, una francesa que sólo un caballero británico es capaz de ayudar. Sin embargo, el verdadero valor de la novela radica en la historia que narra y en la manera en que es descrita la condición de una Paris en llamas y de Londres en una fría y expectante calma.
10. Cuento de Navidad (1843)
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¿Quién no ha visto un promocional de navidad con esta obra de Dickens? La respuesta es, casi seguramente, nadie. Todos hemos tenido el placer de disfrutar de este clásico en todo tipo de versiones. Sin embargo, es justo y necesario afirmar que ninguna se compara con esta joya literaria. No todos los críticos la consideran su mejor narración, pero, de seguro, está instalada en el corazón de sus lectores como tal.
El viejo Scrogge es visitado por el fantasma de su fallecido socio, quien le anuncia otras visitas en la noche de navidad. De este modo, el espectro le pide que los escuche para no pasar a la eternidad en un eterno sufrimiento, atado a las cadenas que él mismo forjó. Espíritus de navidades pasadas, presentes y futuras le dan una valiosa lección de vida que el protagonista sabe aprovechar para realizar un cambio al estilo Dickens y emerger como un verdadero cultor de la época más feliz del año.
¡Hemos llegado al final de nuestro recorrido británico! No dejes pasar el insuperable lujo de tener a Dickens en tu biblioteca. Sus narraciones son de incalculable valor y sus personajes verdaderamente te inspirarán. Cuéntanos cuál de estos títulos ha llamado más tu atención y si ya has tenido la oportunidad de leer alguno de ellos. ¡Te esperamos en la sección de comentarios!