¿Qué se necesita para lograr un cambio? ¿Qué se necesita para que el mundo tome un nuevo rumbo? Pensarás que el camino estará repleto de acciones increíblemente heroicas y peligrosas, acciones que incluso los mismos dioses apreciarían. Pero la verdad es que el cambio se fundamenta en pequeños, pero contundentes, pasos; pasos que se analizan, se piensan y se sienten. Uno de esos grandes pasos lo dio la mujer protagonista de este artículo de Frases de la Vida, ¿tienes una pista de quién es? Bueno… Disfrutaremos de sus hazañas a través de las frases de Amelia Earhart, una de las grandes mujeres importante de la historia.
¿Qué hizo que Amelia Earhart sea hoy un personaje tan fascinante?
Fueron muchas cosas las que posicionaron a esta mujer y a las frases de Amelia Earhart en los pilares de una sociedad que aún hoy en día está repleta de prejuicios, pero también de luchas para liberarse de ellos. Amelia desde muy pequeña desarrolló un gran gusto por la educación y, a través de ella, por hacer parte de la vida real: de una vida hermosa, pero a la vez dolorosa y excluyente para muchos; de una vida que requería valentía, coraje, pero, sobre todo, empatía.
Con el tiempo, Amelia se dio cuenta de que el primer paso para hacerse escuchar y para tener el impacto que ella quería representar era empoderarse, ser consciente de que tenía las mismas capacidades que cualquier hombre y, por tanto, merecía poder aplicarlas y llevarlas a acciones.
Fue debido a esto por lo que Amelia nunca perdió las ganas de hacer aquello que amaba (como la aviación) y que le daba un verdadero lugar en el mundo. Promovió valores feministas, igualdad de género y la necesidad de reconocer a las mujeres, porque ellas siempre logran lo que se proponen. Las frases de Amelia Earhart están acá para actuar como pruebas de ello.
Principales hazañas de Amelia: desde la tierra hasta la nube más alta
- La primera fue una hazaña valiente, bondadosa y empática. Amelia se enlistó como enfermera en un hospital de campaña canadiense para apoyar a los heridos en la Primera Guerra Mundial.
- Luego de esto, inspirada por al arte de volar, el límite fue el cielo. Amelia se convirtió en la primera mujer en volar el Atlántico. Fue como pasajera en un vuelo tripulado por Wilmer Stultz y Louis Gordon en 1928.
- Su pasión y conocimiento por la aviación le permitieron realizar viajes en solitario a través de Estados Unidos, hasta que el momento clave llegó. En 1932, se convirtió en la primera mujer en cruzar el Atlántico en solitario, en un tiempo de 13 horas y 50 minutos. Fue reconocida, entonces, con la Cruz Distinguida de Vuelo del Congreso de los Estados Unidos.
- En 1935, viajó de Nueva York a Ciudad de México sin hacer ninguna escala. Superando los récords de velocidad del momento.
- Finalmente, en 1937 emprende un vuelo con un objetivo grandioso: darle la vuelta al mundo siguiendo la línea del Ecuador. El 2 de julio se pierde toda comunicación con Amelia y su copiloto.
Aunque aún es un misterio la muerte de Amelia Earhart, hay múltiples especulaciones acerca de esto. Lo que si está claro es que se convirtió en un ícono del poder de las mujeres, de la lucha por buscar aquello que tanto se desea y por el valor que tiene el esfuerzo y el compromiso en el cumplimiento de los sueños, por más grandes e intrépidos que sean.
Que te escuchen hasta las nubes con las frases de Amelia Earhart
1. Volar no es un camino de rosas, pero por la diversión vale la pena el precio.
La primera de las frases de Amelia Earhart tiene un mensaje poderosísimo: llegar a las metas no siempre es fácil. Muchas veces todo se complica, pero la recompensa es mucho mayor que todo el esfuerzo puesto. Todo valdrá la pena cuando veas el final del camino.
Para Amelia volar significó romper con prejuicios e injusticias sociales y al final, voló como nadie, superó a todos y hoy sigue en la mente del mundo entero.
2. La manera más efectiva de hacer algo es hacerlo.
Las ideas, aunque maravillosas, son solamente ideas. No trascienden si no son convertidas en acciones, en buenas acciones. Cuando quieras hacer algo, por difícil que sea, ¡hazlo!, ¡triunfa, fracasa, pero hazlo!
3. El efecto de tener otros intereses además de los domésticos funciona bien. Cuanto más uno hace y ve y siente, más puede hacer uno, y más genuino puede ser su apreciación de cosas fundamentales como el hogar, el amor y la comprensión del compañerismo.
Mucho tiempo ya se ha vivido en un mundo marcado por la cotidianidad, por las rutinas. Hemos aceptado injusticias y malos tratos solo por miedo a aquello diferente. Las frases de Amelia Earhart reniegan contra eso. Todos hacemos mejor las cosas y disfrutamos más la vida cuando la vivimos plenamente, cuando sacamos a relucir nuestros talentos y habilidades sin miedo a ser juzgados por ello.
4. Lo más difícil es la decisión de actuar. El resto es sólo tenacidad. Los miedos son tigres de papel. Puedes hacer cualquier cosa que decidas hacer. Se puede actuar para cambiar y controlar la propia vida y el procedimiento. El proceso es la recompensa en sí misma.
Efectivamente, lo más difícil en un proceso de cambio —como lo mencionábamos anteriormente— es decidir que ese cambio es necesario. Es tomar las riendas de la acción. De ahí en adelante, nada, absolutamente nada, es imposible.
5. (…) Debes saber que soy consciente de los peligros, quiero hacerlo porque lo deseo. Las mujeres deben intentar hacer cosas como lo han hecho los hombres. Cuando ellos fallaron sus intentos deben ser un reto para otros.
No hay ninguna justificación para que las mujeres no hagamos lo que sea que deseemos. Hombres y mujeres somos humanos, somo iguales, creamos ideas de la misma manera y queremos salir adelante. Amelia nunca tuvo miedo de empoderar a otras mujeres, de hacerles ver que el mundo era un reto para todos y que todos, sin excepción, debemos enfrentarnos a él.
6. No fui valiente, simplemente no tuve tiempo de asustarme.
El miedo es lo que lleva a la valentía. Mientras no haya espacio para sentir miedo, para aterrarnos, no hay razón para dejar de hacer aquello que tanto nos gusta. Las frases de Amelia Earhart lo demuestran con cada palabra.
7. El coraje es el precio que exige la vida para garantizar la paz. El alma que no lo conoce, no conoce liberación de las cosas pequeñas: no conoce la soledad lívida del miedo, ni las alturas de las montañas donde la amarga alegría puede oír el sonido de las alas.
Es maravilloso sentir coraje. Él te permite sentir los latidos de tu corazón, conectarte con la respiración, explorar tu cuerpo y tu mente con tenacidad hasta encontrar la solución que estas buscando. Al coraje no lo importan los límites, no le importa lo que otros piensen. El coraje saca a la luz tu verdadero ser y toda la emoción escondida con él.
8. Nunca interrumpas a alguien haciendo algo que tú dijiste que no se podía hacer.
Las frases de mujeres históricas resultan motivadoras, pero todos sabemos que hay muchas cosas con las que no siempre vamos a estar de acuerdo. Nunca permitas que tus pareceres influyan en la vida de los demás o en su valentía para tomar acción y el curso de sus vidas. Respeta los caminos de otros, respeta y valora su vida con todo lo que ella implica.
9. El momento de preocuparse es tres meses antes de un vuelo. Decida entonces si la meta vale la pena los riesgos involucrados. Si es así, deja de preocuparte. Preocuparse es agregar otro peligro. Retrasa las reacciones, hace que uno no sea apto … Hamlet hubiera sido un mal aviador. Él se preocupó demasiado.
Para finalizar con las frases de Amelia Earhart hablemos del poder —a veces maligno— de la preocupación. Si ya tienes tus objetivos claros, si tienes también claro el camino, no hay preocupación que valga. Enfócate en hacerlo bien, en disfrutar, ¡en vivir!
Amelia Earhart es una gran inspiración ¿no es así? Todos quisiéramos tener el mismo coraje que tuvo ella dentro de una sociedad negada a escucharla, pero lo que no sabemos es que lo podemos tener y lo único que hace falta es intentarlo.
Antes de que te vayas, cuéntanos: ¿Ya conocías su historia? ¿Cuál de estas frases de Amelia Earhart es ahora tu favorita? No dudes en dejarnos todos tus comentarios aquí abajito para que podamos leerte, ¡estamos emocionados! Y, por si quieres seguir leyendo sobre esta mujer, no te pierdas: el último mensaje de Amelia Earhart.