La llegada del día de la madre pone de manifiesto un sinfín de emociones. Saca a relucir nuestro lado más emocional, para reconocer la labor y el amor de esas mujeres que nos han formado durante tantos años. Hoy en Frases de la Vida nos hemos puesto a pensar en como la poesía para mamá puede alzarse como uno de los regalos más lindos y emotivos. Si eres de los que adora agasajar a tu madre en este día especial, no te pierdas nuestra selección de los mejores poemas para el día de la madre. ¡Acompáñanos!

Índice

5 poemas para el día de la madre que debes conocer

poemas para mamá Frases de la Vida

1. Dulzura, de Gabriela Mistral

Gabriela Mistral es una de las poetas más talentosas de América Latina. Dentro de su obra, esta chilena universal también supo hacer encantadores poemas para el día de la madre. A continuación, Dulzura, una preciosa poesía para mamá contenida en el libro Ternura. 

«Madrecita mía,
madrecita tierna,
déjame decirte
dulzuras extremas.

Es tuyo mi cuerpo
que juntaste en ramo,
deja revolverlo
sobre tu regazo.

Juega tú a ser hoja
y yo a ser rocío,
y en tus brazos locos
tenme suspendido.

Madrecita mía,
todito mi mundo,
déjame decirte
los cariños sumos.»

2. A mi madre, de Edgar Allan Poe

Maestro del cuento y del género de terror, Edgar Allan Poe también tuvo disposición de hacer poemas para el día de la madre. De hecho, a continuación vemos uno de los más lindos y sentidos. Recordemos que Poe perdió a su madre biológica a temprana edad, pero fue criado con igual amor por Francis Allan. Veamos el poema.

«Porque creo que en los cielos, arriba,
los ángeles que uno a otro se susurran
no hallan entre sus palabras de amor
ninguna tan devota como “Madre”,

desde siempre te he dado yo ese nombre,
tú que eres más que madre para mí
y llenas mi corazón, donde la muerte
te puso, libre el alma de Virginia.

Mi propia madre, que murió muy pronto
no era más que mi madre, pero tú
eres la madre de a quien yo quería,

y así eres más querida tú que aquella,
igual que, infinitamente, a mi esposa
amaba más mi alma que a sí misma.»

3. Cuando sea grande, de Álvaro Yunque

El siguiente de los poemas para el día de la madre que queremos compartirte es del escritor argentino Álvaro Yunque. Una poesía para mamá escrita desde la ilusión y la voz de un pequeño niño.

«Mamá: cuando sea grande
voy a hacer una escalera
tan alta que llegue al cielo
para ir a coger estrellas.

Me llenaré los bolsillos
de estrellas y de cometas,
y bajaré a repartirlos
a los chicos de la escuela.

Para ti voy a traerte,
mamita, la luna llena,
para que alumbre la casa
sin gastar en luz eléctrica.»

4. Caricia, de Gabriela Mistral

Volvemos a Chile y a Gabriela Mistral, para traerte una pieza excelsa. Uno de los más hermosos poemas para el día de la madre. Un recuerdo de que el abrazo y la caricia de la madre serán siempre el más hermoso lugar seguro.

«Madre, madre, tú me besas,
pero yo te beso más,
y el enjambre de mis besos
no te deja ni mirar…

Si la abeja se entra al lirio,
no se siente su aletear.
Cuando escondes a tu hijito
ni se le oye respirar…

Yo te miro, yo te miro
sin cansarme de mirar,
y qué lindo niño veo
a tus ojos asomar…

El estanque copia todo
lo que tú mirando estás;
pero tú en las niñas tienes
a tu hijo y nada más.

Los ojitos que me diste
me los tengo de gastar
en seguirte por los valles,
por el cielo y por el mar…»

5. La madre ahora, de Mario Benedetti

Seguimos en el sur del continente americano, y esta vez nos vamos hasta el Uruguay para traerte uno de nuestros favoritos entre los poemas para el dia de la madre, obra del gran Mario Benedetti, honrando y extrañando a su madre durante los doce años que pasó en el exilio.

«Doce años atrás
cuando tuve que irme
dejé a mi madre junto a su ventana
mirando la avenida

ahora la recobro
solo con un bastón de diferencia

en doce años transcurrieron
ante su ventanal algunas cosas
desfiles y redadas
fugas estudiantiles
muchedumbres
puños rabiosos
y gases de lágrimas
provocaciones
tiros lejos
festejos oficiales
banderas clandestinas
vivas recuperados

después de doce años
mi madre sigue en su ventana
mirando la avenida

o acaso no la mira
solo repasa sus adentros
no sé si de reojo o de hito en hito
sin pestañear siquiera

páginas sepias de obsesiones
con un padrastro que le hacía
enderezar clavos y clavos
o con mi abuela la francesa
que destilaba sortilegios
o con su hermano insociable
que nunca quiso trabajar

tantos rodeos me imagino
cuando fue jefa en una tienda
cuando hizo ropa para niños
y unos conejos de colores
que todo el mundo le elogiaba

mi hermano enfermo o yo con tifus
mi padre bueno y derrotado
por tres o cuatro embustes
pero sonriente y luminoso
cuando la fuente era de ñoquis

ella repasa sus adentros
ochenta y siete años de grises
sigue pensando distraída
y algún acento de ternura
se le ha escapado como un hilo
que no se encuentra con su aguja

como si quisiera comprenderla
cuando la veo igual que antes
desperdiciando la avenida
pero a esta altura qué otra cosa
puedo hacer yo que divertirla
con cuentos ciertos o inventados
comprarle una tele nueva
o alcanzarle su bastón.»

En definitiva, los poemas para el día de la madre no son más que una ofrenda, un pequeño regalo que, desde el amor, los hijos podemos hacer a esas mujeres que nos dieron la vida. Y tú, ¿Conocías estas bellas muestras de poesía para mamá? ¿Sabes de otros poemas emblemáticos que quieras que sumáramos a la lista? Anímate a dejarnos tus opiniones en un comentario. ¡Estaremos encantados de leerte! Y mientras tanto, te dejamos con algunas otras lindas opciones de poemas para mamá. ¡Hasta la próxima!