El mundo del horror ha dejado una marca indeleble en la literatura universal. Desde antiguas leyendas hasta modernas novelas, los autores han jugado con nuestros miedos más profundos, transportándonos a lugares oscuros donde la realidad y la pesadilla se entrelazan. Pero, a veces, una simple frase puede bastar para evocar terrores inimaginables. Por eso, nos sumergiremos en el abismo literario para desenterrar algunas de las frases de libros de terror más escalofriantes que han sido plasmadas en papel.
Prepárate para un viaje en Frases de la Vida a través de los rincones más oscuros de la literatura, donde cada palabra es un susurro que resuena con ecos de terror.
Índice
Las 25 frases de libros de terror más escalofriantes
Frases de literatura de terror
1. El germen del pánico pareció cundir entre los hombres del grupo. Una cosa era perseguir a aquel ente innombrable, y otra muy distinta encontrarlo – El horror de Dunwich de H. P. Lovecraft.
2. El mundo no es más que una residencia de cuidados paliativos con aire fresco – Doctor Sueño de Stephen King.
3. La locura es relativa. Depende de quién tiene a quién encerrado en qué jaula – Asylum de Madeleine Roux.
4. Tenía muy agudizado el sentido del oído. Oigo todas las cosas del cielo y de la tierra, y a veces, muchas cosas del infierno – Narraciones extraordinarias de Edgar Allan Poe.
5. Antes o después, a todos nos llega en esta vida un demonio propio que nos persigue y atormenta y al final de cuentas hemos de luchar contra él – Rebeca de Daphne du Maurier.
6. En el norte, donde nunca pisó, rumbo al punto contra el que sus instintos lo han prevenido; allí un espectro lo atrapará. ¡Es la muerte! – La casa y el cerebro de Edward Bulwer-Lytton.
7. ¿Era entonces un monstruo, un error sobre la Tierra, un ser del que todos los hombres huían y a quien todos los hombres rechazaban? – Frankenstein o el Moderno Prometeo de Mary Shelley.
8. Me buscaban, acá estoy. No sé dejar ir a los muertos – Nuestra parte de noche de Mariana Enriquez.
9. Las mentiras son el mortero, mantienen los muros juntos. Si no hubiera tantas mentiras, los muros ya se habrían desmoronado. Sin embargo, en vez de dejar que se vinieran abajo, hemos construido una cárcel para nosotros mismos – A veces miento de Alice Feeney.
10. Alma coge un muñeco y extiende el brazo como para ofrecérselo a alguien, pero allí no hay nadie – Alma de Carlos Sisí.
Cada una de estas frases de libros de terror son un fragmento especial que engloban el suspenso que transmiten cada una de estas obras. Con autores como Stephen King y Lovecraft, el horror está más que asegurado.
Frases de libros de miedo
11. Maldito sea el día en que recibí la vida. Maldito sea mi creador – Frankenstein de Mary Shelley.
12. No hay vida en este cuerpo. Yo soy nada, sin vida, sin alma, odiado y temido, estoy muerto para todo el mundo. Escúchame: yo soy el monstruo al que los hombres vivos matarían. Yo soy Drácula – Drácula de Bram Stoker.
13. Tal vez hubiera muerto sencillamente porque le aterraba seguir vivo – Las Cuatro Estaciones de Stephen King.
14. Yo soy Damien Karras —dijo el sacerdote—. ¿Quién eres tú?
—El demonio – El exorcista de William Blatty.
15. Cuando miras hacia el abismo, el abismo también mira hacia ti – Cita de Federico Nietzsche en Misery de Stephen King.
16. Eddie descubrió una de las grandes verdades de la infancia: los adultos son los verdaderos monstruos – Eso (It) de Stephen King, una de las mejores frases de películas de terror.
17. Regresaré de mi propia muerte para vengar la de ella con todo el poder de las tinieblas – Drácula de Bram Stoker.
18. A veces morir es mejor – Cementerio de Mascotas de Stephen King.
19. Si no he de inspirar amor, inspiraré temor – Frankenstein de Mary Shelley.
20. El lugar lógico para encontrar una voz de otros tiempos es un cementerio de otros tiempos – En las montañas de la locura de H. P. Lovecraft.
Frases de libros de terror largas
21. Lo ahorqué porque recordaba que me había querido y porque estaba seguro de que no me había dado motivo para matarlo; lo ahorqué porque sabía que, al hacerlo, cometía un pecado, un pecado mortal que comprometería mi alma hasta llevarla —si ello fuera posible— más allá del alcance de la infinita misericordia del Dios más misericordioso y más terrible – El gato negro de Edgar Allan Poe.
22. Vivimos en una plácida isla de ignorancia en medio de mares negros e infinitos, pero no fue concebido que debiéramos llegar muy lejos. Hasta el momento las ciencias nos han causado poco daño; pero reconstrucción de conocimientos dispersos nos dará a conocer tan terribles panorámicas de la realidad, y lo terrorífico del lugar que ocupamos en ella, que solo podremos enloquecer como consecuencia de tal revelación, o huir de la mortífera luz hacia la paz y seguridad de una nueva era de tinieblas – La llamada de Cthulhu de H. P. Lovecraft.
23. El maestro habría pasado una vida agradable —pese al diablo y todos sus manejos— si en su camino no se hubiera cruzado una mujer, ente que causa más confusión al hombre mortal que cualquier fantasma, duende o la estirpe entera de las brujas – La leyenda de Sleepy Hollow de Washington. Irving
24. Retrocedieron con inexpresable horror al descubrir que el sudario y la máscara cadavérica que con tanta rudeza habían aferrado no contenían ninguna figura tangible. Y entonces reconocieron la presencia de la Muerte Roja – La máscara de la muerte roja de Edgar Allan Poe.
25. ¡Escúcheme, hombre de corazón duro! ¡Escúcheme, orgulloso, severo y cruel! ¡Habría podido salvarme y devolverme la dicha y la virtud, pero no quiso! Usted es el destructor de mi alma, mi asesino, ¡Que caiga sobre usted la maldición de mi muerte y la de mi hijo aún no nacido! – El Monje de Matthew Gregory Lewis.
Los libros de terror tiene el poder único de sumergirnos en mundos oscuros con tan solo unas pocas palabras cuidadosamente elegidas. Es por eso que te invitamos a dejarnos tus propias frases de libros de terror favoritas o a compartir esa línea de un libro que te mantuvo despierto toda la noche. Si quieres conocer más frases, no te pierdas esta selección de los mejores escritores de terror.
